PREVIAS MLB 2016: ARIZONA DIAMONDBACKS
Su esencia: jóvenes y descarados en una liga de clásicos
Los Arizona Diamondbacks llegaron a la MLB en 1998, lo que les convierte en una rareza en una liga donde muchos equipos ya jugaban en 1898.
Los seguidores de la MLB tienen un gusto reposado por lo suyo. Elegante, si queréis. Amor por el blanco y negro y por las historias que se remontan a antes de las dos grandes guerras. Por eso miran con recelo las novedades y aquello que es disruptivo con la tradición. Los Arizona Diamondbacks lo son. Fundados en 1998 se convierten en una absoluta rareza en medio de franquicias más que centenarias. Como una guitarra eléctrica en un concierto de música clásica. Y, sin embargo, y merced a sus primeros grandes años en la competición, ya han conseguido ser mirados de reojo, y no con desdén precisamente, por las aficiones de Dodgers o Giants, por ejemplo, que les temen. Y con razón.
Propietario: Ken Kendrick *****
Kendrick tiene que ser un señor adorado por los fans del béisbol en Arizona. Fue parte de los que se empeñaron en crear el equipo een 1995 y, desde entonces, ha tabajado tanto en las oficinas técnicas como en las económicas. Uno de sus principios es revertir los beneficios del club al campo.
Manager general: Daver Stewart ***
Stewart fue fichado por Tony La Russa, el presidente de los Diamondbacks, por su pasado en común cuando eran jugadores. Cogió el puesto a finales de 2014 y en su primer año pareció no hacer mucho ruido. Pero en esta segunda offseason, ya asentado en el puesto, ha revolucionado la franquicia. Ha dilapidado gran parte del sistema de promesas que con tanto mimo se había construido para conseguir jugadores contrastados como es el caso de Shelby Miller. Y, sobre todo, ha gastado todo lo posible y un poco más en arrancar a Zack Greinke de los Dodgers, y del resto de la liga. Si su estrategia es exitosa o no se verá, pero arriesgada es un montón.
Entrenador: Chip Hale **
Chip Hale afronta su segunda temporada al frente del equipo de Arizona con unas expectativas muy superiores a las del año pasado. De hecho, con unas expectativas desorbitadas al respecto de la franquicia con la que tiene que trabajar. Pero cuando tienes figuras y mucho dinero invertido no te queda más remedio que ganar partidos. Y muchos. Porque, en caso contrario, llegarán las críticas. No es ajeno a la franquicia Hale; entre los años 2007 y 2009 estuvo en el equipo técnico sirviendo como entrenador adjunto. Ese periodo debió servirle para conocer la idiosincrasia del club, algo que seguro le ayudó a tomar la decisión de meterse de lleno en esta aventura.
Su gran estrella: Paul Goldschmidt
Paul Goldschmidt es esa extraña figura que todo lo sabe hacer en un campo de béisbol y, encima, todo lo hace de manera superlativa. Pasa por ser un pegador espectacular, pero se le puede ver realizando enormes jugadas defensivas casi todas las noches.
Estrella ofensiva: A.J. Pollock
Pollock va a empezar su quinto año en la liga y no ha parado de mejorar en ninguno de ellos. Su trayectoria ascendente le ha llevado ya a ser All Star. Todo lo anterior podría decirse de los jóvenes prometedores que pululan por la MLB, pero es diferente cuando, de repente, en el último año, pasas a ser poco menos que una estrella. Como de golpe. Pollock es un jugador que lo tiene todo: golpeo, velocidad, defensa, conocimiento del juego. Debe establecerse en tipo capaz de superar los 20 home runs, algo que no está tan claro que vaya a conseguir, pero su equipo le necesita a ese nivel. A fin de cuentas, bateará por delante de Goldschmidt y eso le va a asegurar hacer grandes números en lo que a carreras se refiere al final de la temporada.
Pitcher estrella: Zack Greinke
Pollock va a empezar su quinto año en la liga y no ha parado de mejorar en ninguno de ellos. Su trayectoria ascendente le ha llevado ya a ser All Star. Todo lo anterior podría decirse de los jóvenes prometedores que pululan por la MLB, pero es diferente cuando, de repente, en el último año, pasas a ser poco menos que una estrella. Como de golpe. Pollock es un jugador que lo tiene todo: golpeo, velocidad, defensa, conocimiento del juego. Debe establecerse en tipo capaz de superar los 20 home runs, algo que no está tan claro que vaya a conseguir, pero su equipo le necesita a ese nivel. A fin de cuentas, bateará por delante de Goldschmidt y eso le va a asegurar hacer grandes números en lo que a carreras se refiere al final de la temporada.
Chase Field: Su techo retráctil fue pionero en USA
Fue el primer estadio construido con un techo retráctil, debido a las altas temperaturas en verano en Arizona, y césped natural. Es tremendamente grande, se puede a ver a millas de distancia con ese aspecto de hangar de aeropuerto en vez de parque de béisbol. Su capacidad se debe a que cuando se construyó, en 1998, la demanda de tickets era más alta; ahora mismo el estadio se queda vacío muchas veces a los D-Backs, aunque si se obvia eso, se puede ver los mejores juegos de béisbol desde una grada baja o incluso la piscina.
La altitud es clave
Es el tercer estadio que está a mayor altitud y eso favorece la trayectoria de la bola. El muro tanto en centro-izquierda como en centro-derecha es favorable, pero el muro del centro solo concedió once home runs en 2015, compensando ese aspecto con hits de bases extra.