El carácter autodestructivo de la natación sincronizada española vuelve a primera línea después de la eliminación del equipo en el Preolímpico de Río Janeiro , la confirmación de un descenso que comenzó en 2011 y que se ha acentuado en el último ciclo olímpico. El presidente, Fernando Carpena , atendió a este diario para mostrar su “decepción” y “sorpresa” por esta noticia que ha impactado como un meteorito, teniendo en cuenta que el bajón más prolongado coincide con la destitución de Anna Tarrés en septiembre de 2012 , tras lograr plata y bronce en los Juegos de Londres.“Sería simplista decir que esto ha ocurrido porque no estaba Tarrés. Es un grupo distinto, otro contexto, y eso son especulaciones”, comentó el presidente, quien mostró las líneas a seguir a partir de ahora: “Hay que analizar el porqué de estos resultados y tomar decisiones . El cuerpo técnico tiene contrato hasta diciembre, y nosotros las apoyamos. Este es año electoral”. Desde los Juegos de Londres, Ucrania, Japón, Italia y Canadá han superado a las españolas. El presidente valora la actitud de las nadadoras, quienes “han puesto todo de su parte y se han esforzado para estar en los Juegos”. Además, quiso añadir que “la sincro española no ha desaparecido de los Juegos, porque estaremos representados por el dúo, si no nos llegamos a clasificar, eso si sería un palo enorme”. A partir de ahora se abre un periodo de reflexión aunque Ona Carbonell y Gemma Mengual seguirán preparando la cita de Río con el objetivo de pelear por las medallas.