Un Naturhouse alegre y serio fulmina al Frigoríficos Cangas

El Naturhouse La Rioja ha apabullado hoy al Frigoríficos del Morrazo, con un contundente 37-23, que sirve para despejar cualquier duda respecto a si ahora hay alternativa a los riojanos por la segunda plaza de la Liga Asobal.

El equipo de Cangas de Morrazo llegaba a Logroño como la revelación de la primera vuelta de Liga y el conjunto que más podía competir con el Naturhouse por el segundo puesto.

Por ello, posiblemente, el equipo riojano ha hecho un partido muy serio y a un ritmo muy alto, con lo que ha terminado por dar un claro correctivo al equipo gallego. El partido ha tenido un inicio igualado y durante casi un cuarto de hora el juego de memoria de los gallegos ha desconcertado a la defensa local.

Pero en cuanto el Naturhouse ha logrado sacudirse la tensión de ir solo un tanto por delante y ha colocado el 13-10 en el marcador (m.13) todo ha cambiado y el choque casi ha quedado definido.

El equipo de Logroño ha confiado más en su defensa y en su portería y, con esos apoyos, ha explotado su velocidad y su lanzamiento exterior.

Luisfe Jiménez -que hoy regresaba en casa tras media temporada en la liga francesa- se ha reivindicado como referencia ofensiva (6 goles antes del descanso) y Pedro Rodríguez -del que ya se sabe que dejará el equipo en verano- ha sido un "estilete" con su velocidad.

Eso, unido a destellos de calidad de Langaro -que también debutaba hoy- y Molina han terminado por hundir a un Cangas negado en el lanzamiento y que poco a poco vio como el partido se le ponía más difícil.

Primero fueron cinco goles en contra de los gallegos (12-7, m.16), luego siete (16-9, 25) y el choque llegó definido al descanso con once tantos de ventaja para los riojanos (21-10).

Esa diferencia marcó por completo el segundo tiempo, que simplemente fue un intercambio de goles y jugadas de ataque entre los dos equipos.

De hecho, por momentos, para el Naturhouse fue un entrenamiento más que otra cosa, ya que se dedicó a probar cambios de posición entre sus jugadores y a dar minutos a los menos habituales.

El Frigoríficos del Morrazo trató de poner voluntad, pero ya estaba entregado y, por eso, tampoco logró reducir las diferencias de manera significativa.

De hecho, justo al final, con cuatro buenas defensas, los riojanos aumentaron su ventaja hasta los catorce goles finales; algo casi impensable en un partido en el que se esperaba que el Frigoríficos del Morrazo "discutiera" el segundo puesto de la Liga.