La Super Bowl 50 conquista internet
Que la Super Bowl es un monstruo económico es innegable.Pero además, en internet generen números que aumentan año a año.
Año a año la Super Bowl, la final de la NFL, se afana por romper récords establecidos por ella misma. Es una competición que comenzó hace un par de décadas y en la que sólo existe un rival, un ente, y la victoria o la derrota apenas si varían un palito de número romano en el apellido del acontecimiento. Lo de la derrota es un eufemismo porque, extraños asuntos puntuales al margen, la Super Bowl siempre gana.
Las variables pueden ser escogidas al azar: espectadores televisivos, precios de entradas, comida vendida, bebida consumida, dinero en apuestas, coste de los anuncios, beneficios televisivos... escoge e, indefectiblemente, te verás atrapado en un mar de cifras que te dicen que en todo la última Super Bowl disputada es la que se lleva los récords. O, poniéndonos tontos, la de hace dos o tres temporadas en un apartado concreto.
Así tiene que ser en una liga, la NFL, instalada como la más rica del planeta a finales del siglo XX y cuya distancia no hace sino aumentar porque su objetivo es ser cada vez más grande. Siguen a rajatabla esa norma de los negocios que dice que no existe el punto de equilibrio, que sólo existe el crecimiento o el decrecimiento, y en lo primero se afanan.
En esta edición número cincuenta de la Super Bowl, que enfrentó a los Denver Broncos y a los Carolina Panthers, no han faltado ese tipo de récords, por supuesto. 167 millones de espectadores en Estados Unidos vieron el partido en algún momento del mismo, aunque la audiencia media fue de 111,9 millones, que no supera a la de los últimos dos años. 132,54 millones fueron apostados en Las Vegas en el partido de forma legal, con las estimaciones de apuestas ilegales llegando a 4.100 millones. El precio de 30 segundos de anuncio se elevó a cinco millones de dólares. Un vaso de cerveza en el Levi's Stadium, de San Francisco, donde se disputó el encuentro, costaba 15 dólares. Y, ojo ahora, 1.300 millones de alitas de pollo se comieron durante la Super Bowl.
1.300 millones de alitas de pollo.
En todos los casos anteriores se trata de nuevas plusmarcas de la Super Bowl en su anual careo contra sí misma. Pero, dado que entendemos que existe una cosa llamada la finitud de recursos, tarde o temprano aparecerá un techo irrompible ¿no? ¿no?
Es aquí donde aparece internet, con su fuerza multiplicadora, y donde la Super Bowl 50 no es que gane a sus antecesoras (y no mire a la cara si quiera al resto de competiciones del planeta) sino que las multiplica por varios órdenes de magnitud. Porque las cifras del impacto del partido en la red son como para que la NFL de palmas con las orejas.
En el aspecto estrictamente deportivo, la Super Bowl 50 fue vista en stream de la cadena CBS por 3,96 millones de espectadores. Sin contar los que pudieran verlo fuera de Estados Unidos. En media, 1,4 millones de espectadores por minuto utilizaron su móvil o tableta para seguir el partido. Es el triple que cualquier otro acontecimiento anterior (pista: la Super Bowl XLIX). Pero es que Youtube ha informado, además, que los anuncios que se pasaron en medio del partido han superado los 300 millones de visionados en su plataforma. Twitter no se queda atrás, ya que se estima que 3,9 millones de tuits se envieran en el descanso del encuentro y que éste ha sido el evento más tuiteado de la historia. No así en facebook, donde con 38 millones de personas hablando del asunto, y 155 millones de interacciones, se ha colocado como el segundo en el ranking histórico (pista: el primero es la Super Bowl XLIX).
Pero el impacto del partido en internet se ve, también, en los datos que aportó la compañía Pizza Hut, que aseguró estar vendiendo 1.800 pizzas por minuto mientras la defensa de los Denver Broncos borraba a los Carolina Panthers de la faz de la tierra. Pues bien, en otro nuevo récord a sumar a esta ristra, Pizza Hut llegó a 12 millones de ingresos y 48 millones de consumidores... online, durante el partido. Se trata de un 20% más que el anterior evento poseedor del título (pista:... bueno, creo que lo pilláis).
Que la Super Bowl es un monstruo económico es una evidencia innegable. Que su crecimiento, aunque sorprenda bajo la lógica de que ya deberían tener trillado su mercado, esté ahí año a año es algo que se da por hecho. Pero que, además, en internet generen números que aumentan año a año en unos porcentajes descomunales es lo que produce más vértigo. Un día todo esto se acabará pero, hasta entonces, el descomunal negocio de la Super Bowl seguirá siendo la absoluta referencia de la industria deportiva. ¿Sabéis cuál es el segundo? ... ... buenos chicos.