Favre llega al al Salón de la Fama en primer intento
El ex QB de Green Bay y el ex pasador de Raiders, Ken Stabler, destacan en la lista de ocho integrantes de la Clase 2016 del recinto de los inmortales.
Un hombre cuya carrera inició en el anonimato y terminò por convertirlo en uno de los hombres más resistentes que no sólo la NFL sino el deporte de Estados Unidos ha visto y otro al que la inmortalidad le llegó demasiado tarde.
Estas son las características de Brett Favre y Ken Stabler, quienes encabezan la Clase 2016 de nuevos miembros del Salón de la Fama y que fue revelada la noche de este sábado por la NFL.
Favre, quien inició 297 juegos como titular de forma consecutiva en un lapso de 18 temporadas, llegó al recinto de los inmortales de Canton, Ohio, en su primer año de elegibilidad. No hacerlo hubiera sido una afrenta, no sólo para él sino para la tradición y valores que el futbol americano presume inculcar en quien juega este deporte.
Favre, quien inició su carrera como suplente en Atlanta en 1991 y se convirtió en uno de los mejores quarterbacks en la historia de la Liga al jugar con Green Bay de 1992 a 2007, era dueño de nueve récords al momento de su retiro, entre ellos el de más yardas por aire, más pases de touchdown, más campañas con 3 mil o más yardas por aire, además de otros infames, como el de más intercepciones en la historia de la NFL (336) o más capturas sufridas (525).
Favre quizá pudo haber llegado al Salón de la Fama hace tres años, luego de que tras dejar a los Empacadores tras la temporada de 2007 y, aunque de manera forzada, anunciar su retiro, anunció que volvería a la NFL.
Un año con los Jets (2008), un anuncio maás de retiro y do temporadas con Minnesota más tarde, Favre decidió colgar el casco definitivamente al final de la temporada de 2010.
El otro nuevo miembro del Salón de la Fama que recibió un fuerte aplauso fue Ken Stabler, ex quarterback de los Raiders de Oakland, pero quien recibió el honor y reconocimiento demasiado tarde tras fallecer el pasado 8 de julio a los 69 años de edad.
Stabler ganó el Súper Tazón XI con los Raiders, cuando los de negro y plata vencieron 32-14 a los Vikingos de Minnesota.
Jugó en Oakland de 1970 a 79 y en 1980 fue cambiado a Houston, donde jugó dos años antes de ir a Nueva Orleans y jugar con los Santos de 1982 a 84 antes de poner fin a su carrera.
La elección de Stabler y de Eddie DeBartolo como nuevos miembros del Salón de la Fama parece ser una forma de reconocer a las ciudades de Oakland y San Francisco, particularmente a Raiders y 49’s por sus contribuciones a la organización del Súper Tazón 50, pues ambos personajes fueron constantes candidatos a ir a Canton por varios años sin que lograran el favor de quienes eligen a los inmortales.
A DeBartolo se le reconoce su trayectoria como dueño de los 49’s, equipo al que regresó de la mediocridad en la que estaba sumergido a finales de los años 70 y lo mantuvo como una de las franquicias más ganadoras por casi dos décadas, así como por sus contribuciones al desarrollo de la NFL.
Tony Dungy, el primer coach de raza negra que ganó un Súper Tazón (XLI), también es miembro de la Clase 2016 del Salón de la Fama. Junto a él ingresarán en agosto próximo Marvin Harrison, quien fue su receptor en Indianápolis, Kevin Greene, uno de los mejores linebackers de los años 90 y quien ayudó a Pittsburgh a llegar a un Súper Tazón, el tacle ofensivo Orlando Pace (San Luis y Chicago) y el guardia de Detroit de 1952-55, Dick Stanfel, quien también jugó con Washington (1956-58).