Los Patriots se dedican a probar corredores a costa de los Titans

Primera serie del los Titans, tres y fuera. Primera serie de New England, 6:27 minutos con touchdown final de Gronkowski. Sin olvidar las cuatro carreras de Bolden para 19 yardas más una recepción. ¿Otra multiplicación de los panes y los corredores en el backfield de Boston? Y con LaFell convertido en el peligro profundo que Belichick lleva buscando en él desde hace tanto tiempo.

Bandera blanca y punto final. Nos rendimos y nos vamos a casa. Por favor, no nos peguen más. Si hubiera dependido de Tennessee, el partido ni se habría disputado.

Dos ligas diferentes, dos formas de ver la vida. Un equipo que solo quiere seguir creciendo pensando en el futuro, y otro cuya única razón de ser es seguir ganando en el presente. Y esta crónica podría acabar en el siguiente punto, porque todo lo fundamental está dicho.

El resto son simples detalles. Como el balón perdido por Mariota que terminó recuperado por Akiem Hicks en la end zone de los Titans para que los Patriots se pusieran 14-0. O el intento de retorno de Amendola, que perdió el balón y terminó convirtiéndose en field goal de Tennessee después de que en tres intentos infructuosos (14-3). Y qué decir del touchdown de pase de30 yardasde James White, que se paseó entre los defensas rivales, apáticos e incapaces ni siquiera de acercarse a él (21-3). Como os decía, la multiplicación de los panes y los corredores. Incluso Iosefa, un full back que hasta ahora malvivía en la escuadra de prácticas, tenía su oportunidad en el backfield de New England y lo hacía bien.

A propósito ¿Habéis visto lo que está engordando Bill Belichick? Parece que está convirtiendo tantas victorias en grasa de michelín.

No había partido. Era un nuevo entrenamiento en el que los Patriots se dedicaron a probar soluciones para su juego de carrera y el objetivo fundamental era evitar las lesiones. Sin embargo, Mariota se hizo daño en la rodilla y tuvo que irse a la banda. Ya nunca volvió. Mettenberger le sustituyó y fue a por todas, aunque empezara su actuación con un fumble que su equipo recuperó. Poco después los Titans intentaban una cuarta y uno a la desesperada que no llegaba a ninguna parte.

Se consumía la primera mitad y los Patriots anotaban un field goal más y se marchaban al descanso ganando 24-3, a pesar de que en el último segundo Gostkowski fallara una patada de 48 yardas, algo muy poco habitual en uno de los mejores francotiradores de la competición.

La ‘no historia’ del partido continuó durante la segunda mitad. Belichick seguía probando a Bolden y Iosefa como corredores, a James White como receptor desde el backfield, y también cargaba el peso aéreo sobre LaFell, que esta vez sí pareció el arma que llevan tanto tiempo buscando en Boston. Sin embargo, tanto entrenamiento abrió la puerta a los Titans que por fin parecieron meterse en el partido. En la primera serie de la segunda mitad, Mettenberger conectó con Walker para un touchdown de siete yardas (24-10), sus rivales respondían con un field goal (27-10) y, a falta de 10 minutos para la finalización, el quarterback suplente de los Titans volvía a conectar con Walker con un bombazo de 57 yardas (27-16) de la que además salía lesionado Chung. El safetie no era el único jugador de los Patriots que terminaba el partido tocado. Amendola y Hightower también tuvieron que retirarse.

Los Titans estaban a 11 puntos y quedaban casi siete minutos. Las luces rojas se encendieron en la banda de los Patriots, que volvieron a apretar el acelerador. Primero fue un field goal después de que Gronkowski no fuera capaz de controlar el balón en la end zone (30-16), luego la segunda intercepción a Mettenberger, y por fin un último field goal que cerró el marcador (33-16).

Y así acabó el partido. Convertido en un Combine para los Patriots, en busca de las fórmulas que puedan convertir su backfield en un arma peligrosa en enero, y de un LaFell que debe empezar a ser un factor para ellos.