"¿Un deporte pijo? Venimos todos de casas humildes"

El pádel celebra desde este miércoles su gran fin de fiesta en el pabellón 9 de IFEMA, en Madrid. El World Padel Tour reúne en las Master Final a las seis mejores parejas femeninas y ocho masculinas. Y entre ellas destacan Fernando Belasteguin (Pehuajó, Argentina, 36 años) y Pablo Lima (Porto Alegre, Brasil, 30). Unos les llaman caníbales, otros les califican de tiranos... La realidad es que, tras deshacer el primero la pareja que formó con Juan Martín Díaz que les mantuvo 13 años como números uno (170 victorias en 191 finales), con su nueva dupla ha ganado este año 11 pruebas. Puro espíritu competitivo.

“Ahora parece que ganar es lo fácil cuando es algo extraordinario. Nos hemos puesto el listón muy alto”, reflexiona Bela. Hoy comenzarán a las 18:00 contra Allemandi-Lamperti.

Pero el dúo Bela-Lima pendió de un hilo. En el primer torneo en marzo, en Barcelona, el brasileño sufrió un golpe violento contra el cristal. “Sólo los más íntimos saben por lo que hemos pasado. Se ‘rompió’ un hombro. Y eso para un jugador de pádel es como si te cortaran los dedos. Fueron dos meses largos, de mucha ansiedad, y eso nos hizo después mucho más fuertes mentalmente”, relata el argentino, que tuvo que jugar en San Fernando y La Palma junto a Willy Lahoz, ganando también. En junio regresó Lima y, desde entonces, 51 victorias, cuatro meses invictos.

Los dos tumban el estereotipo, que todavía ronda, de deporte pijo que se forjó en los tiempos en los que el expresidente José María Aznar presumía de juego con su pista en La Moncloa. Lima llegó de Brasil en 2005 jugándose su dinero para hacerse un hueco. Bela es un currante. “¡Entre nosotros, no hay ningún pijo! Todos venimos de familias humildes. A un jugador le alcanza para el día a día. Cuando no sea profesional, venderé mi tiempo de nueve de la mañana a ocho, dando clases, para mantenerme, como todo el mundo. Dentro de la cancha juego por el pan de mi familia”, refiere Bela.

“Hay un montón de clubes municipales donde jugar por cinco euros. Es un deporte muy barato y por eso es tan popular aquí. En Brasil, alquilar una pista te cuesta 40”, apoya Lima.

Futbolistas y tenistas como Alex Corretja, Carlos Moyá, Juan Carlos Ferrero, Anabel Medina o Sara Errani se han acercado al pádel, jugando alguno incluso en torneos World Tour: "Debemos darles las gracias por agarrar la pala, porque la repercusión es espectacular”. Andrés Iniesta escribió el prólogo del libro Bela: esta es mi historia. “Nos conocimos a través de un amigo común y es un orgullo. ¡Juega bien!”, responde el ya 14 años número uno cuando se le pregunta si tiene mano el barcelonista. Dos campeones que dejaron pronto sus casas para triunfar en su deporte. Dos campeones que se reconocen el uno en el otro.