Revancha ante las noruegas por obtener la segunda plaza

Llega el gran día, la jornada de la revancha, aunque sea menor. España se vuelve a encontrar con Noruega (20:30, Teledeporte), la vigente campeona de Europa, la que arrebató a las Guerreras la posibilidad de colgarse el oro. Pero es que Noruega siempre es la favorita, juegue contra quien juegue y allá donde lo haga. Su palmarés en lo que va de siglo: ahí están sus dos oros olímpicos consecutivos, en el 2008 y en el 2012, sus cinco Europeos, su título mundial. Frente a esa selección se miden hoy las españolas con la segunda plaza del grupo en juego.

España y Noruega sólo pueden aspirar a la segunda posición. Porque Rusia, sin derrotas, ya es primera, y Rumanía ya es cuarta haga lo que haga. Ahora, hay que mirar al grupo C, pero da igual, y, además se decidirá casi a la misma hora: Brasil será primera y Alemania, cuarta; es decir, el rival español saldrá entre Francia y Corea, que, por si fuera poco, empataron con polémica en su grupo.

Tal y como están los equipos, da igual ser tercero o segundo, y es posible que en esa tesitura Jorge Dueñas se reserve para los octavos del domingo o el lunes a Marta Mangué. La canaria sólo ha jugado un encuentro por culpa de los isquiotibiales. Si fuese necesario, la Pantera jugaría, pero está en el aire su concurso, porque el choque de esta quinta jornada tiene más valor testimonial.

Respeto. Además, en las filas españolas hay un respeto por las noruegas. Antes de comenzar el Mundial, la mayoría del grupo estaba de acuerdo en que lo mejor de jugar ahora con las nórdicas es que ya no te las vuelves a encontrar hasta la final.

Para Ainhoa Hernández, la pivote del Zuazo, verse de cerca con Heide Locke (1,73 metros) es cumplir un sueño “porque se trata de la mejor pivote del mundo”.

Con el empate España sería segunda, pero ese resultado ni se contempla ante una escuadra con dos de las mejores porteras del mundo, Kari Grimbo y Silje Solberg, una de las dos gemelas de una selección en la que cualquier nombre son palabras mayores, como Camila Herrem, como Linn Sulland, como Betina Riegelhuth. Pero es de los encuentros en los que las Guerreras se superan, de los que les gusta jugar, y en los que las nuestras sacan esa vena combativa que tanto enamora a sus seguidores.