NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

CAROLINA 29 - INDIANÁPOLIS 26

Panteras mantienen, y presumen, un invicto de papel

Carolina dejó escapar una ventaja de 17 puntos y permitió que le anotaran 20 sin respuesta, pero logró rescatar el triunfo ante unos erráticos Potros.

Actualizado a
Cam Newton celebra la victoria de los Panthers en el Bank of America Stadium de Charlotte.
AFP

En la NFL todo es posible, incluso que un equipo con síndrome de “Doctor Jekyll y Mr. Hyde” marche invicto con el mejor inicio en su historia.

Las Panteras de Carolina dejaron escapar una ventaja de 17 puntos en el último cuarto, pero lograron mantener su invicto con un gol de campo de 52 yardas de Graham Gano en tiempo extra para vencer 29-26 a los Potros de Indianápolis.

Durante 50 minutos, y pese a que las condiciones no eran favorables por la fuerte lluvia que cayó en Charlotte, las Panteras contuvieron a unos erráticos Potros para enfilarse a lo que parecía una victoria sin muchas complicaciones.

Pero, de un momento a otro, las Panteras mostraron otro rostro. Dejaron de hacer lo que durante por más de tres cuartos les funcionó y le dieron vida a unos Potros cuyo mérito fue no dejar de luchar.

Esa doble cara que mostró Carolina es la que impide señalarlo como serio contendiente a representar a la NFC en el Súper Tazón. Regularmente, un equipo con un invicto de siete victorias no sufre pronunciados altibajos como el que casi a voluntad experimentaron las Panteras ante los Potros.

Los Patriotas, los Broncos, los Bengalíes son avasallantes de principio a fin o se recuperan rápidamente de alguna situación adversa y ponen fin a las amenazas rivales antes de que éstas los agobien. Esa es la actitud de un invicto que da confianza.

Perder una ventaja de 17 puntos en 10 minutos y que te anoten 20 sin respuesta porque eliges dejar de presionar a Andrew Luck, el quarterback más interceptado de 2015, y porque decides no consumir tiempo en el reloj para dar el tiro de gracia o, al menos, limitar la reacción de Indianápolis, no son cualidades de un contendiente al título de la NFL y eso es lo que hizo Carolina ante Indianápolis.

Los Potros iniciaron el juego con un balón suelto dentro de su yarda 25 y con una intercepción a Luck, la primera de tres que sufriría en el duelo, y Carolina capitalizó los yerros visitantes para irse 10-0 arriba con ayuda de una carrera de tres yardas para anotación de Jonathan Stewart.

Los Potros y su mentalmente frágil quarterback se acercaron con dos goles de campo, pero las Panteras aumentaron su ventaja a 23-6 con pases de touchdown de Cam Newton, de 27 y ocho yardas a Greg Olsen y Corey Brown, respectivamente.

Fue en ese punto que Carolina comenzó a personificar a Mr. Hyde. Tras la anotación de Brown, Gano falló el punto extra que hubiera obligado a los Potros a anotar tres touchdowns y no sólo dos y el gol de campo con los que, eventualmente, forzaron al tiempo extra.

La defensiva de Carolina, cuya presión había provocado dos intercepciones a Luck, la segunda capitalizada con el pase de touchdown a Brown, dejó de agobiar al pasador de los Potros.

Luck aprovechó para lucir como el quarterback certero y preciso que fue hasta los Playoffs de la temporada pasada, pero esa personalidad no le duraría hasta el final.

Después de que Luck acercó 23-18 a Indianápolis con pase de touchdown de 18 yardas a Andre Johnson, el ataque dirigido por Cam Newton tuvo oportunidad de dejarle poco tiempo a su rival, pero un castigo les impidió avanzar más y le devolvieron el ovoide a Indianápolis tras consumir sólo 2:23 minutos en el reloj de juego y dejarle 4:41 a los Potros.

Luck no desaprovechó y comandó dos ataques que culminaron, el primero, con pase de touchdown de ocho yardas a Colby Fleener, y el segundo con el gol de campo de 50 yardas de Adam Vinatieri que forzó al tiempo extra.

Incluso, los Potros se fueron al frente 26-23 en el suplementario, pero Carolina empató, no sin antes tener otro momento que define al equipo como un invicto frágil, cuando Ted Ginn Jr. no pudo atrapar un envío profundo que Newton le mandó a las manos y que, de atajar, hubiera podido llevar a la zona final para sentenciar el duelo.

Newton pudo poner a Gano en posición de empatar y su defensiva logró forzar la tercera y decisiva intercepción a Luck para darle a su pateador la oportunidad de ganar el partido, y lo logró.

Sufrir en exceso cuando se tiene prácticamente la victoria en la bolsa no es una “cualidad” de un equipo invicto y eso mostraron las Panteras ante los Potros.

El momento es importante para Carolina. El triunfo puede servirles de lección para aprender a sentenciar los juegos a su favor o hacerles creer peligrosamente que son capaces de superar adversidades, incluso, creadas por ellos mismos.