Habana-Savea: colosal foco en el Sudáfrica-Nueva Zelanda
Nueva Zelanda es favorita para una semifinal durísima. Elogio de Meyer: “Estos All Blacks son el equipo que mejor ha jugado al rugby en la historia”.
Un Sudáfrica-Nueva Zelanda garantiza rugby de máximo nivel. Dos títulos planetarios en cada palmarés y decenas de duelos en los que suelen saltar chispas y en ocasiones hasta sangre fruto de la intensidad con la que unos y otros, especialmente los Boks, cargan sobre su rival. Los All Blacks son los actuales campeones, y también los favoritos para una primera semifinal que se antoja durísima. Aún se recuerdan los duelos del Championship en 2013, o la victoria sudafricana durante ese torneo en 2014... Los números, y sobre todo el rugby desplegado por unos y otros, dicen que Nueva Zelanda debe ganar hoy (17:00 horas). Pero a Sudáfrica nadie se atreve a quitarla del cartel, ni siquiera estos All Blacks a los que Meyer, seleccionador rival, ha considerado “el equipo que mejor ha jugado al rugby en la historia”. Fuera presión, toca jugar.
Sudáfrica va a más tras la derrota vergonzante frente a Japón. Nueva Zelanda optó por dosificar y cuando llegó lo bueno endosó una paliza histórica a Francia (62-13). Ante Sudáfrica no reservará. Eso sí, los Springboks cuentan con una delantera terrorífica. Gigantes capaces de todo con tal de certificar que Nueva Zelanda siga sin ganar un Mundial fuera de su país.
El foco estará puesto en las alas: Habana-Savea. Para muchos, los herederos naturales del mítico Lomu. En realidad son una evolución del mismo. Éste dominó en los 90, el sudafricano en la década pasada y el joven Savea reclama el trono desde que debutara en 2012 con un promedio brutal. Todos tienen argumentos para que no se les menosprecie en comparación con sus homólogos.
Los tres han logrado la plusmarca de ocho ensayos en un Mundial (Savea amenaza con batirlo). En favor de Lomu, el mediático de la terna, que lo concentró todo en los años puntuales de Mundial (1995 y 1999). En el de Habana el título de 2007 (es el único campeón de los tres) y el hacer tantos ensayos en un combinado donde se prima a la delantera y apenas se juega a la mano... ¿Savea? Sale a casi ensayo por partido. Una barbaridad.