Cachorros y una cruel broma que tomó tintes de profecía
Si la novena de Chicago cristaliza la escena de Volver al Futuro II en la que es campeón de la Serie Mundial, deberá hacerlo al estilo hollywoodense, con drama.
Hacer énfasis en ese punto hubiera sido, quizá, tema para una película aparte.
En 2015, los Cachorros están en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, pero si quieren hacer realidad lo que inició como una broma y luego tomó tintes de profecía, deberán montar un épico regreso para recuperarse de una desventaja de 3-0 en el duelo ante unos Mets de Nueva York a los que, seguramente, poco o nada les importa lo que hace 16 años dijo una película sobre su rival.
Todos conocemos la historia. Cuando Marty McFly viaja del año 1985 al futuro ve en una pantalla digital la noticia: los Cachorros ganan la Serie Mundial el 21 de octubre de 2015 tras vencer al equipo de Miami.
En ningún momento se dice si la conquista del título fue fácil o sencilla.
La intención de Bob Gale, guionista de la segunda parte de la saga de Volver al Futuro, era jugar con un humor muy negro para los aficionados de este equipo, pero muy ingenioso con lo que en ese entonces eran 82 años de sufrimiento para los Cachorros.
A Gale no le resultó difícil jugar con el sentimiento de un club de beisbol y toda su base de aficionados, pues resulta que es seguidor de los Cardenales de San Luis, acérrimo rival de los Cachorros.
Uno sólo puede imaginar el sentimiento que Gale experimentó cuando hace unos días, los Cachorros, el equipo del que se burló en 1989, eliminó a sus Cardenales, algo que probablemente nunca imaginó al escribir aquél guión.
Otra situación con la que Gale jugó fue la creación de un equipo de Grandes Ligas en Miami, aunque con dos detalles distintos a lo que la realidad ofrece.
Y si los Cachorros llegan al Clásico de Otoño, enfrentarán a Kansas City o a Toronto.
Para 2015, los Cachorros suma ya 107 agónicos años sin ganar una Serie Mundial. La última vez que la ganaron fue en 1908, cuando vencieron a Detroit en lo que fue su segundo título consecutivo.
Desde entonces han perdido siete Clásicos de Otoño y no llegan a uno desde 1945, situación que tiene una explicación que también rebasa los límites de lo comprensible.
De acuerdo a varios relatos, Billy Siains, dueño de una taverna en Chicago llamada “Billy Goat’s Tavern”, asistía con frecuencia a Wrigley Field para ver a los Cachorros y lo hacía en compañía de su mascota.
Durante la Serie Mundial de 1945, ambos fueron expulsados de las gradas por quejas de otros aficionados por el mal olor que despedía la cabra y Siains, molesto, lanzó una maldición mientras salía del estadio en la que decretó que los Cachorros no volverían a una Serie Mundial por la afrenta de sacarlos a él y a su mascota de Wrigley Field.
Coincidencia o no, los Cachorros han acariciado la posibilidad, pero no han regresado a una Serie Mundial por una u otra razón.
En 2015, pocos les daban oportunidad de hacer algo importante, pero los Cachorros están, otra vez, en la antesala de un Clásico de Otoño, pero, para llegar a él, deberán remontar a unos Mets que han lucido poderosos.
Si le preguntan, Gale quizá tenga varias ideas de cómo dramatizar y cristalizar la broma/profecía que nos contó hace 16 años.