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SERIES DIVISIÓN LIGA NACIONAL

La mejor represalia de los Mets fue ganar el tercer partido

Después de un segundo partido marcada por la lesión de Rubén Tejada provocada por Utley, los Mets sacaron toda la artillería para resarcirse.

Actualizado a
Yoenis Cespedes logró un home run de tres carreras en la demolición de los Dodgers.
Andy MarlinUSA Today Sports

El tercer partido de la serie disputada entre los New York Mets y Los Ángeles Dodgers debería estar marcado por el duelo sobre la loma entre Matt Harvey, ni más ni menos que El Caballero Oscuro de Gotham contra Brett Anderson.

Sin embargo, todo Estados Unidos se ha visto sacudido por la polémica que rodeó el barrido de Chase Utley sobre Rubén Tejada, al que le partió el peroné y todo el mundo ha dado su opinión al respecto, no obteniendo una visión mayoritaria sobre lo que pasó en realidad (si fue limpio o no) o eso creo entender.

Igualmente, todo el país anticipaba las represalias que podrían tomar los Mets sobre Utley y más teniendo en cuenta que poseía números excelentes contra Harvey, lo que hacía más lógica su inclusión en el turno de bateo inicial de Don Mattingly.

Pero Mattingly decidió que Utley no iba a jugar y a pesar de las numerosos cánticos del público del Citi Field que pidieron que saliera al campo, Utley no pudo hacer ningún swing ni comprobar lo que podía ocurrir a continuación.

La represalia que tomó el conjunto neoyorquino fue bombardear y de qué manera a los distintos pitchers que puso el técnico de los Dodgers a lo largo de todo el partido y establecer el récord de home runs en una jornada de playoffs con veintiuno, sumando los que habían conseguido en los cuatro encuentros disputados.

La verdad es que tanto se había anticipado la salida de Harvey que luego no llegó a producirse esa actuación estelar, tan clásica en él, con dos carreras limpias en cinco entradas con siete strikeouts pero a estos Mets tan mejorados en ataque les vale, incluso con una actuación tan limitada como esa.

Cuando cuentas con un Curtis Granderson que es capaz de batear como antaño con sus cinco carreras impulsadas y con Yoenis Céspedes y Travis d´Arnaud siendo capaces de sacarla del campo, eso te da un margen de maniobra tremendamente importante para que los Mets sean capaces de sobrevivir incluso aunque su pitcher titular y no un cualquiera sino todo un Matt Harvey, te lance sólo esas cinco entradas.

Al igual que ocurre en la otra serie de la Liga Nacional, el equipo con la marca más baja es el que tiene la situación bajo control y con la oportunidad de terminar el trabajo ante su público, una afición que no veía la postemporada en Queens desde hacía nueve años.

Los Dodgers se juegan toda la temporada y para ello no hay nadie mejor que el mejor pitcher del mundo, Clayton Kershaw. Mucho se ha hablado sobre si es capaz de brillar es época de playoffs y su marca de 1-6, 4.99 en octubre no hace sino alimentar ese debate. En apenas unas horas sabremos si Kershaw consigue evitar el enésimo naufragio del proyecto Dodger con el extra de hacerlo con sólo tres días de descanso.

Los New York Mets contarán con la aportación de su rookie Steven Matz, pitcher que podría llevar a los Mets a sus primeras Series de Campeonato desde 2006.