Argentina apaliza a Georgia y casi asegura los cuartos (54-9)

El rugby es un deporte de equipo pero en según que selecciones ciertos estandartes ejercen sobre el resto una influencia determinante. Georgia, con su capitán Gorgodze (jugador del potente Toulon francés), es un ejemplo. No hay más que ver la forma en la que los Pumas apalizaron al actual campeón del 6 Naciones B por 54-9, con siete ensayos en su casillero y el consiguiente bonus ofensivo. Georgia, que soñaba con el segundo puesto tras ganar a Tonga en el duelo inaugural, se encontró con el rodillo albiceleste en la segunda mitad. Mientras Gorgodze estuvo fuera tras ver una amarilla, los Pumas endosaron tres ensayos, y a su vuelta, con el partido roto, los compañeros bajaron los brazos aún más.

Argentina jugó mejor, pero Georgia le aguantó toda la primera mitad. Hasta el descanso, los Pumas vivieron del pateo de Nico Sánchez, con un drop (3') y dos golpes de castigo, aunque entre medias llegara el ensayo de Lavanini. Georgia sólo vio el camino con los penaltis de Kvirikashvili. Llegaron a ir perdiendo 8-6, y al descanso (14-9) también tenían a tiro a Argentina. Pese a la presión, los Pumas jugaban serenos. Tenían una idea preconcebida, como ante Nueva Zelanda, y con ella devolvieron a Georgia a la realidad. El colegiado inglés JP Doyle ya había advertido a Gorgodze por reiteradas infracciones y una vez se hartó le mostró la amarilla. Entonces, bien fuera por la superioridad numérica, por la influencia del capitán... o ambas cosas, los Pumas encontraron huecos por todos lados. Tres ensayos seguidos (Cubelli, Imhoff y Cordero) y bonus en el bolsillo. A su vuelta, y con el carrusel de cambios, el nivel de intensidad bajó. Y Argentina lo aprovechó porque una vez sacas a Georgia de la presión de su delantera titular, son un equipo de 6 Naciones B no muy superior a España. Los Pumas se gustaron y Landajo junto al segundo en la cuenta de los alas Imhoff y Cordero cerraron la cuenta. Argentina sacó el billete a cuartos de final. Salvo desastre ante Tonga. Georgia debe seguir creciendo. Ser tercero de grupo ya es algo histórico que le asegura ir a Japón 2019, el segundo puesto ya era demasiado estando Nueva Zelanda y la emergente e ilusionante Argentina de por medio.