Japón revienta la historia del rugby ganando a Sudáfrica
El país nipón, organizador del Mundial de 2019, derrotó 32-34 a los Springboks. En los siete mundiales anteriores, sólo había ganado una vez, en 1991 a Zimbabue.
Japón ya es historia en el mundo del rugby. Lo iba a ser por organizar el Mundial de 2019, pero desde hoy también forma parte de la leyenda tras ganar por 32-34 a Sudáfrica en Brighton. Los Springboks, campeones planetarios en 1995 y 2007, perdieron ante Japón, que había disputado hasta la fecha los siete campeonatos...y sólo había ganado un partido, a Zimbaue en 1991, dos empates y 21 derrotas de 24 disputados.
Una de las grandes candidatas al título cedió ante el empuje y el descaro de la selección nipona. Japón ocupa el puesto 13º en el ranking de World Rugby, diez puestos por debajo de una Sudáfrica que si bien llegaba tocada a la cita, ni en la peor cábala entraba el perder ante Japón. El partido acabó 32-34 pero se fue fraguando el triunfo japonés a base de descaro. Goromaru adelantó a los asiáticos (0-3) y aunque Sudáfrica respondió, Japón volvió a colocarse por delante (7-10) tras el ensayo de Leitch. Con 12-10 se llegaría al descanso. Ya en la segunda mitad fue un intercambio de golpes, con los Springobks incapaces de distanciarse y aferrándose Japón al pateo de Goromaru. Ya al final, y pudiendo forzar el empate, el cuadro nipón se lanzó al abismo. Ahora o nunca. Buscó el ensayo con ahínco ante la potente delantera sudafricana, le encaró en la melé y ya con tiempo cumplido y jugando a la mano firmó el 32-34 con un ensayo en la esquina que le convirtió en leyenda.
El cuadro dirigido por Eddie Jones ha crecido muchísimo en los últimos años desde que los yenes atrajeron en su Top League a grandes leyendas mundiales ya en su fase de retiro. Una especie de Major League Soccer (la competición estadounidense de fútbol) en la que sus jugadores han ido evolucionando a pasos agigantados. De hecho tres japoneses (Horie y Tanaka) han llegado a militar en franquicias de la potente Super XV, la competición de Sudáfrica, Nueva Zelanda y Australia. Japón cuenta con varios nacionalizados, salta a la vista, como Wing, Tui, Sau, Mafi, Leitch, Broadhurst, Ives o Hesketh, autor del ensayo con el que derrotaron a Sudáfrica ya con tiempo cumplido.