La mano de Pierre-Paul está peor de lo que se temían los Giants
No creen que jugará en 2015. Aparte de perder su dedo índice, fracturar su pulgar y tener injertos de piel por su accidente con fuegos artificiales, también le falta la mitad de otro dedo.
Los Giants dan por hecho que Jason Pierre-Paul no volverá a jugar en 2015. Resulta que las lesiones que sufrió el jugador en un accidente pirotécnico el pasado 4 de julio son peores de lo que se temían en la franquicia neoyorquina. Aparte de no contar con un dedo índice en la mano derecha, fracturar su pulgar y tener que esperar a que cicatricen sus injertos de piel, también le falta la mitad de otro dedo en la misma mano.
Pese a ello, el equipo neoyorquino no contempla soltar a su estrella defensiva. Durante la pasada offseason, estos le aplicaron el tag de franquicia (una herramienta contractual para garantizar su continuidad un año más) y el hecho que siga sin firmar su contrato hace que no le cueste dinero a los Giants. Además, Nueva York tiene un as en la manga por si decide firmarlo: le colocarían en la lista de lesiones no deportivas. Esto pondría fin oficialmente a su temporada, le dejaría sin paga y, además, Pierre-Paul no podría demandar a la liga al haber reconocido que su lesión no se debe a causas deportivas.
En estos momentos, el defensive end se ejercita en solitario en su residencia en el sur de Florida. Durante su visita a Nueva York durante la pretemporada, se ofreció a jugar desde la primera semana siempre que los Giants le facilitasen una protección para la mano. Pero el equipo neoyorquino no quiere contar con él si no está al cien por cien, y mucho menos pagándole unos 870.000 dólares por partido. Dentro de la pésima situación, la franquicia quiere al menos proteger sus finanzas.