Madison Bumgarner carbura a toda potencia para octubre

Como dice mi buen amigo y socio en esta preciosa iniciativa del periodismo deportivo, Pepe Rodríguez, él tiene una cita fija todas las semanas en la Major League Baseball y es cuando lanza Madison Bumgarner para los San Francisco Giants, inmersos en la siempre complicada labor de defender el título logrado el año pasado.

Con 127 partidos disputados de los 162 que componen la temporada regular, la sensación de urgencia que empieza a asentarse en todos los estamentos que rodean este deporte es tremenda, sobre todo para aquellos equipos que van por detrás en la clasificación para la postemporada.

Esa es precisamente la situación que atraviesan los californianos tanto en el frente de la División Oeste de la Liga Nacional como de cara a la wild card de la liga senior. Si todo lo anterior no fuese suficiente, queda aclarar que los vigentes campeones del mundo atraviesan una brutal sección del calendario con duelos directos contra los equipos con los que se va a tener que batir el cobre de cara a lograr esa ansiada clasificación, que es el primer paso a defender el trofeo del comisionado.

Desde el 31 de julio al 3 de septiembre, San Francisco Giants tiene que disputar 26 partidos contra básicamente equipos que no sólo tienen récords positivos y con aspiraciones de hacer algo grande en la Liga Americana sino contra esos obstáculos en su propia liga llamados Pittsburgh Pirates, Washington Nationals, Chicago Cubs, Los Ángeles Dodgers y St. Louis Cardinals.

Hasta la fecha, el récord contra esos clubes ha sido 9-11, que no es especialmente halagüeño pero le ha permitido ganar medio partido sobre los Dodgers y mantener la presión contra el club con el presupuesto más alto de toda la competición, franquicia contra la que terminará esta inhumana secuencia de encuentros.

Al mando de las operaciones, nos encontramos a un viejo conocido de todos y es el MVP de las Series Mundiales del año pasado. Una de las claves respecto a lo que podía dar de si “MadBum” en 2015 era ver cómo le afectaría el tremendo castigo al que se le sometió durante la postemporada y más concretamente en la gran final, donde se echó al equipo sobre sus hombros como nunca se ha visto en el Clásico del Otoño. Todavía me pongo a recapacitar en qué estarían pensando los votantes a la hora de dar la actuación más destacada en una gran final a Lebron James y no a Bumgarner. En fin, cosas que pasan.

Esas más de 270 entradas hacían pensar en un rendimiento inferior a cargo del de Hickory pero… ¿Un tipo que protagoniza un anuncio blandiendo de forma extraordinaria un hacha a la hora de talar un árbol va a notar las secuelas? Adivinad en qué estado quedó el árbol…

Madison Bumgarner no sólo no está notando las secuelas de los esfuerzos de octubre sino que está cosechando su mejor campaña hasta la fecha como profesional. Lidera la Liga Nacional en triunfos (16) y en partidos completados (3), es tercero en entradas (175), strikeouts (192) y en porcentaje de victorias (72.7%). La efectividad de 2.97 no está entre los mejores, ocupa la decimocuarta plaza, y eso le elimina de ser una seria alternativa a Zack Greinke, máximo favorito para hacerse con el Cy Young aunque MadBum obtendrá votos y no pocos.

Agosto ha sido un mes muy propicio para el zurdo, con un récord de 5-0 y es la tercera vez que logra una marca así en un mes a lo largo de su carrera. El gran Juan Marichal es el único que le supera desde que los Giants pasaron del Harlem a la Bahía en los 50.

Su titánica actuación la pasada noche contra los casi imparables Chicago Cubs fue portentosa no sólo por lo logrado (12 strikeouts en 6 entradas y una carrera concedida) sino por lograrlo en sólo 98 lanzamientos.

Afrontando el tramo final de este calendario tan complicado, los Giants se encuentran en una excelente posición para alcanzar el liderato de su división que es la mejor vía para llegar a octubre. Pero Bumgarner no lo puede hacer todo él solito (aunque lo de batear también queda abierto a discusión). Necesita que un fantástico grupo de individuos de los que se compone la plantilla del campeón, saque fuerzas de flaqueza para el tramo final y se sobreponga a la adversidad de tantos lesionados clave.

Como diría el gran Rudy Tomjanovich, el gran entrenador de los Houston Rockets, “nunca subestimes el corazón de un campeón”. Y nosotros no vamos a hacerlo en el caso de los San Francisco Giants.