La Selección bate a Rusia y cierra el Mundial séptima
En un encuentro con muchos goles, el equipo de Oca recuperó su efectividad en ataque y cimentó la victoria en el tercer parcial (14-10).
La Selección se despidió del Mundial de Kazán con un séptimo puesto y un sabor de boca más dulce. En un encuentro alocado, más bien un partido de tenis de mesa que de waterpolo, lo habitual cuando el rival es Rusia, las guerreras del agua ganaron a la anfitriona en un partido de muchos goles, de gran atractivo para los aficionados presentes, que se mostraron poco animosos con su selección, tras caerse de la lucha de las medallas como le ocurrió a España.
El primer cuarto fue una locura, una oda al ataque. España se puso por delante gracias a su mayor talento. A diferencia de los anteriores encuentros, ante Estados Unidos y China, las de Oca se mostraron más acertadas en la finalización de las jugadas (5-3). Mati Ortiz, Tarragó, Pareja, Espar y Forca soltaron la mano para convertir, prácticamente, cada ataque en gol. Miki Oca no perdía la intensidad en la banda, exigente como pocos con un equipo que recuperó la sonrisa el último día de campeonato.
Rusia se acercó en el marcador en el segundo cuarto (8-7), pero la Selección siempre siguió por delante. Las lanzadoras españolas empezaron a encontrar remates cómodos, ante la floja defensa rusa, que perdió intensidad conforme avanzaba el encuentro. Un parcial de 4-1 en el tercer cuarto, con tantos de Laura López (2), Tarragó y Pili Peña, fue suficiente para cimentar el triunfo (12-8).
La ventaja siguió ampliándose con goles Maica y Jenni, dos de las capitanas del equipo, que no decayeron pese a la ventaja (14-9). Tarragó anotó el último gol del encuentro (15-10) y completó un duelo brillante en el que marcó cuatro tantos. El cierre a unos campeonatos en los que España no ha podido revalidar su título mundial, un desliz en el brillante camino español trazado desde los Juegos de Londres, en 2012. La última vez que España finalizó séptima fue en Melbourne, en 2007.