Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

Khalil Mack: Presente y futuro de los Oakland Raiders

En una división que ya tiene a los que tal vez sean los dos mejores pass-rushers de la liga (Justin Houston y Von Miller), se les ha unido un tercero en discordia que no es otro que Khalil Mack, el sensacional Linebacker exterior de los Oakland Raiders. Pese a que su casillero de sacks solo refleja cuatro capturas, su juego va más allá de lo cuantificable y en tan solo una temporada, se ha convertido en uno de los mejores jugadores defensivos de la liga, e incluso es debatible pensar en él como el mejor 43 OLB de toda la NFL. 

Khalil Mack es un jugador polifacético y con el que un DC puede permitirse el lujo de ser creativo, ya que puede rendir a gran nivel en diferentes situaciones. En la defensa base de Oakland juega como Sam linebacker e incluso como Defensive End con la mano en el suelo o atacando el hombro exterior del Offensive tackle en frentes de cuatro. Podemos hablar de él como un jugador de élite ante la carrera: ha sido 2º de la liga en stuffs -13- (placajes sobre o por detrás de la línea de scrimmage) solo por detrás de JJ Watt y pese a que su número de sacks sea intrascendente, ha tenido 51 presiones sobre el Quarterback rival, el sexto linebacker de toda la liga que más presión ha generado. Aún no ha tenido mucha responsabilidad en cobertura, pero a nivel colegial demostró que podría ser un perfecto curl/flat defender si se le pidiera. 

La comparación más acertada sería la de Justin Houston. Ambos pueden funcionar en multitud de roles, bien sea parar la carrera, ejercer presión sobre el QB rival o defender el pase con criterio, ya sea cubriendo su zona, hombre o tapando líneas de pase cuando van a por el Quarterback. Como pass-rushers tienen también muchos recursos físicos, atléticos y un amplio repertorio de movimientos en sus manos. Tal vez Justin Houston es físicamente aún más imponente que Khalil Mack y obviamente ha demostrado mucho más como pass-rusher, pero Khalil Mack tiene un motor non-stop que no tiene Justin Houston, que a veces se toma algunos snaps de descanso. También Mack es más agresivo y ataca la jugada desde el inicio, mientras que Houston es más tentativo y le gusta ver como se desarrolla la jugada, esto corre en favor de Mack en algunas ocasiones y en favor de Houston en otras, son estilos diferentes. En cualquier caso, estamos ante dos jugadores con bastantes similitudes. 

A Khalil Mack nadie le ha regalado nada, fué un recluta que pasó desapercibido para las universidades y tan solo Liberty y Buffalo, universidades muy menores, le ofrecieron beca para jugar como colegial. En la MAC, una conferencia menor y difícil para hacerte un nombre, Mack dominó durante los cuatro años que estuvo en el campo e hizo lo propio cuando jugó ante Ohio State y sus más de 100.000 espectadores en la grada, el día de su doctoración como jugador de football. Una persona trabajadora, humilde, que no hace ruido pero que debemos hablar de él como absoluto presente y no solo como futuro, pese a su inexperiencia en la NFL. Él y Sio Moore forman una de las parejas de linebackers exteriores más interesantes y jovenes de la liga y a partir de ahí, Oakland debe construir su defensa. Khalil Mack es el presente de los Oakland Raiders y su mejor jugador desde Nnamdi Asomugha