Tampa Bay no ha de tener sólo un runningback titular
En las últimas semanas hemos leído informaciones procedentes del entorno de los Tampa Bay Buccaneers que nos han ido dando pistas de quién podría será el running back titular del equipo para la entrante temporada de 2015. ¿Y a dónde nos conducen todas esas pistas? Al mismo punto del que partíamos. Seguimos sin saber quien se llevara la mayoría de balones a la mano en Buccaneers.
Hace un par de semanas, durante los primeros entrenamientos del equipo, desde el staff se comentaba el gran estado de forma de Charles Sims. Se intuía que ese piropo indicaba que las riendas del backfield serán entregadas al jugador de segundo año. Y nos pilló a todos bastante de sorpresa, dado que su primer año no fue nada espectacular. Sims debutó en la semana 10 de la pasada temporada, y siempre estuvo por detrás en la lista de titulares detrás de, o bien Bobby Rainey, o bien Doug Martin (cuando se lesionó el primero, regresó de lesión el segundo). Consiguió 185 yardas en 8 partidos, una media de 2.8 yardas por intento. Vamos, que para tanto bombo que le han dado, debe haberse tirado 5 meses currándose el cuerpo en el gimnasio.
Pero he aquí el contragolpe. Hace una semana el General Manager de Bucanneers nos deslizaba que Doug Martin es el RB titular. El jefazo Jason Licht nos contaba que jamás había visto mejor a Doug Martin. Aunque luego salió Lovie Smith a decir que estamos en los entrenamientos, y aquí no hay lista de titulares aun. Pero si hacemos caso al manager, esto significaría que por fin el corredor vuelve a ser el de 2012, su año de novato. Aquel que se comía las yardas como pipas y se hizo más de 250 yardas en un partido ante Raiders. Eso fue antes de que las lesiones, las altísimas expectativas y algo más que habrá por ahí, bajaron su nivel al de un corredor mediocre.
No escuchéis a Licht. Yo prefiero hacer lo que dice Lovie Smith y no considerar que nadie sea titular. Porque es la situación que vemos si leemos la realidad de la NFL. Los “runningback committees” son lo imperante, salvo en aquellos equipos que tienen un RB tipo Jamaal Charles, Marshawn Lynch, DeMarco Murray, etc. Y cuanto más claro sea que no tienen a un corredor bestia en su plantilla, menor diferencia habrá entre el número de balones que recibe un corredor y otro. Estos serán llamados corredor 1 y corredor 2, pero será una formalidad, por rellenar los papeles de estadísticas.
Y esto cuando se trate de 2 corredores los que comparten escena, que como haya un tercer corredor en el equipo (running backs de emergencia o fullbacks puros aparte), también recibirá balones. ¡Y fijate, que parece que esta es la situación de Buccaneers! Bobby Rainey tuvo sus pequeños momentos el año pasado, y perfectamente podrían darle 5 balones por partido. Y esto sería beneficioso para el equipo.
Total, que no es el fin del mundo no saber quien es el running back titular de Buccaneers, más que nada porque no lo va a haber. A no ser que de aquí a septiembre haya una lesión, o Martin o Sims se coman el menú completo del peor local de comida rápida de Tampa. Es hora de que compartan escena, es hora de que compartan el balón. Si a alguien le tienen que quitar el balón es a Jameis Winston. Por eso de facilitar el aterrizaje en la NFL al primer pick del pasado Draft.