CLEVELAND BROWNS
Johnny Manziel ni huele la titularidad en los Browns
Mike Pettine, entrenador de Cleveland, ha montado un sistema y una forma de trabajar ajena a su QB de primera ronda en esta pretemporada.
Todas las informaciones que emanan de los primeros días de entrenamiento de los equipos de la NFL ha de ser cogido con pinzas. Apenas se han visto las caras los jugadores y los entrenadores, se han saludado, han analizado un par de vídeos, han dicho que están juntos en esto para ganar una Super Bowl (lo han hecho hasta los Jaguars, fijo) y, venga, al campo a practicar un poco. Los entrenadores apenas si habrán podido esbozar su filosofía, sus jugadas y sus deseos para este año. Pero...
... pero hay signos que apuntan tan claramente a algunas conclusiones que es importante subrayarlas. De entre ellas, destaca lo que parece el final del camino de Johnny Manziel en los Cleveland Browns.
Según ESPN Cleveland, Mike Pettine, entrenador de los Browns, ha comenzado los entrenamientos de la temporada 2015 dando todos los galones con los titulares al QB Josh McCown en detrimento de Manziel. No sólo eso, sino que se evidencia que la propia estrategia de juego de los Browns está encaminada, este año, a ser todo lo contrario de lo que supondría darle el balón a Johnny Football. Es decir, seguridad con el balón, carrera, defensa, pases fáciles y downs de supervivencia antes que alegrías y descontrol, justo lo que hizo famoso a Manziel.
Y es que es lógico. Pettine es un entrenador de perfil defensivo al que le cayó el año pasado el chaparrón de Johnny Football. Un QB elegido en primera ronda, hagas lo que hagas, se va a comer el resto de los debates del equipo y, lo que es más importante, va a mediatizar el estilo de juego. El año fue una tortura entre las tensiones de los directivos para que jugase Manziel y la idea de Pettine de mantener a Brian Hoyer como titular. A pesar de comenzar bien, de gestionar la situación con claridad en favor de Hoyer, lo cierto es que el equipo se consumió en el debate. Cuando al fin Manziel consiguió la titularidad se vio que no estaba preparado para jugar en la NFL y que su profesionalidad dejaba mucho que desear.
La historia aún tendría un final más grave, pues el QB de primera ronda acabó ingresando, este invierno, en una clínica de desintoxicación. Por supuesto, y desde un punto de vista personal, no se puede más que aplaudir la valentía de Manziel por dar ese paso y desearle lo mejor para vencer a sus demonios y sus adicciones.
Pero en lo deportivo parece que las dificultades personales de Johnny Football le han dado a Pettine la coartada perfecta para hacer lo que le pide el cuerpo, que es olvidarse de él lo antes posible. No sólo de él, sino que también de su estilo alocado, inconsistente, chisposo, divertido, genial y catastrófico a partes iguales. Porque lo que quiere el entrenador es dormir tranquilo todas las noches.
Los Browns ficharon en esta agencia libre a Josh McCown, 36 años y 12 de jornalero en la liga, justo para esto, para ser un game manager. La definición de game manager da urticaria a los amantes del arte y ensayo en la NFL, pero es poesía pura para algunos entrenadores. Se le va a pedir que no pierda el balón. Punto. Que se la de al corredor, que no se coma sacks por su propia culpa y que pase el melón a sus receptores desmarcados 5 yardas por delante de él. Que sobreviva de un down al siguiente. Y nada más.
No se elije a un QB de primera ronda para hacer eso. Pettine lo sabe, y por eso está usando esta pretemporada para establecer un estilo que impida a Manziel siquiera acercarse a la titularidad, ni por equivocación.
Como decía al principio, esto sólo está comenzando y hay mil factores que pueden cambiar el curso de un equipo NFL. Más si estamos hablando aún en mayo. Mucho más si estamos hablando de los muy impredecibles Cleveland Browns. Pero Mike Pettine ha hecho su elección, que va más allá de los QBs, y lo que quiere es diferente a lo que quieren los que eligieron a Manziel con la primera ronda del año pasado. En caso de que la apuesta le salga bien, los días de Johnny Football en Cleveland están contados y su era se habrá acabado en el equipo antes de comenzar.