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ESCÁNDALO DEFLATEGATE

Darrelle Revis ataca a los Patriots y a Brady por el Deflategate

El exjugador de New England, fiel a su estilo individualista, no duda en hablar de la tendencia de su antiguo equipo a vivir en el límite de la ley.

Darrelle Revis y Tom Brady se saludan en un partido de la pasada temporada.
Jim RogashGetty Images

Darrelle Revis ha ganado un anillo, una Super Bowl, con los New England Patriots, pero eso no ha cambiado un ápice su forma de ser ni su manera de pensar con respecto al equipo. Así lo ha demostrado en una reciente entrevista al Daily News en la que no muestra mucha simpatía por su antigua franquicia ni por su QB titular, Tom Brady, con respecto al escándalo Deflategate.

Revis ha dicho: "New England ha estado haciendo este tipo de cosas en el pasado y metiéndose en problemas. Cuando estas cosas pasan repetidas veces a lo largo del tiempo se llegan a estas sanciones". El cornerback estrella nombra el "Spygate" y deja caer que en los Patriots se ha vivido en el límite de la ley demasiado a menudo como para evitar las sanciones por el Deflategate.

Sobre Tom Brady añadió: "Tom estaba allí cuando sucedió todo lo que sucedió en el pasado de los Patriots. Si la NFL cree que ha cometido el delito y que le ha de sancionar, pues que así sea. Se que todo el mundo lo está sacando de quicio porque se trata de Tom Brady,la cara de la NFL, pero si ha cometido el delito ha de pagarlo como cualquier otro".

Para el nuevo defensor de los Jets eso no significa que Brady no sea uno de los mejores QBs de todos los tiempos, o "incluso el mejor", añadió, pero "eso no es como que te den una tarjeta para librarte de la cárcel" si lo haces mal.

Darrelle también aprovecha la entrevista para criticar que la Unión de jugadores no hubiese sido más dura en la negociación del 2011 y le hubiese quitado al comisionado de la liga la capacidad de ser juez, jurado y ejecutor, todo a la vez, en este tipo de casos.

Revis ha sido acusado de mercenario de manera habitual. Se le considera un tipo individualista en el vestuario, alguien que va a la suya, y que no duda en coger todo el dinero que le ponen delante,cuando negocia,por encima de cualquier otra circunstancia. Así se le llamó cuando abandonó los Jets, el equipo de su vida, por los Buccaneers. Así se le catalogó cuando firmó un contrato de un año con sus antiguos archienemigos de los Patriots. Y huelga decir que entre seguir en una franquicia ganadora como es New England y jugar para una que no lo es en absoluto como la de New York acabó escogiendo, claro, la del dinero. Esto no es una crítica, en absoluto, pues es muy libre de actuar como entienda, pero con sus palabras sobre el Deflategate no va a quitarse ese sanbenito. Algo que, por cierto, no parece que le quite el sueño.