Previa del draft: más pass rushers que estarán en el top 10

De Beasley, los expertos destacan su explosividad y dicen que es siempre el que da el primer paso tras el snap. Tiene pies rápidos y buenas caderas para ir hacia su objetivo. Aunque algo más pequeño de lo que suele gustar a los scouts (mide 1,90) es más poderoso de lo que aparenta. Un entrenador ha dicho de él que es lo que buscas si juegas con una defensa 3-4.

Entre sus puntos flacos se citan sus problemas contra el juego de carrera y cierta dispersión que le hace perder la pista de la jugada algunas veces, o parecer desmotivado si la jugada fluye hacia el otro extremo de la línea.

En los cuatro años que ha estado en Clemson, su producción a ido de menos a más, siendo elegido para el primer equipo de la conferencia ACC en 2013 y 2014, All-American por consenso en 2013 y 2014, jugador defensivo del año de la ACC en 2014 y campeón de la Orange Bowl el mismo año. Además, se ha licenciado en sociología.

Alvin Dupree, conocido también como Bud Dupree, es un pass rusher productivo gracias a su capacidad física, largos brazos y una explosividad que le permite localizar rápidamente al portador del balón y lanzarse a por él.

Entre sus puntos a mejorar estaría su fuerza física, ya que confía más en su agilidad para pasar los bloqueos, lo que le hace incapaz de superarlos una vez atrapado en uno.

Dupree ha jugado cuatro años para la Universidad de Kentucky, siendo elegido para el primer equipo de la conferencia SEC en 2014, año en el que consiguió 74 tackles y 8 sacks como titular de los Wildcats. Su mejor temporada en tackles fue su año de sophomore, en el que consiguió 91.