¿Qué trama Quinn en Atlanta?

Atlanta pasó página de la desastrosa temporada 2014 con cambios en su estructura: despidieron a Mike Smith. No me sorprende esta decisión.

Smith llegó en 2008 de la mano del GM Thomas Dimitroff en medio de la tormenta producida por el escándalo de los perros de pelea de Michael Vick. La pareja manejó la situación con mucho tino y restructuró el equipo. Sacó petróleo del draft con Matt Ryan y empezó a reclutar talento.

En los 7 años bajo el mando del entrenador, el equipo pasó de ser un equipo vainilla (un equipo normalillo sin ton ni son pero que cae bien, como el helado de vainilla) a ser un referente en ataque. Después de casi tocar el cielo en 2012 (perdió la final de la NFC contra los Niners después de estar 17 puntos arriba), todo se desmoronó.

Smith siempre mostró un mal manejo de tiempos durante los partidos, además de ordenar malas jugadas en momentos claves que al final costaron la derrota a los Falcons. Estos defectos se pudieron maquillar con buenos resultados, pero después de estas últimas temporadas en las el equipo perdió su identidad y cosechó pésimos resultados finalmente llegó el cese de Smith. Dimitroff sigue bajo observación, pero está claro que el nuevo zar en Atlanta es Dan Quinn.

Dan Quinn fue hasta hace poco el coordinador defensivo de Seattle, la mejor defensa de los últimos años. Su filosofía de trabajo no la podemos ver en sus resultados pero el mismo la explicó muy bien: “el éxito de nuestra defensa (la de Seattle) no es el sistema que utilizo, sino a que hemos podido poner a cada jugador en una posición en la que pueda tener éxito”. Quinn no busca imponer por ejemplo el sistema de defensa que utilizó con éxito en Seattle, sino que piensa adaptarse a lo que tiene en Atlanta, y a lo que traiga.

Nueve caras nuevas han llegado a Atlanta de la mano del nuevo entrenador, además hay que añadir que Atlanta cuenta con la octava elección en el draft de este año y otras ocho selecciones. A pesar de eso, Quinn no ha dudado en decir a los fans que espera que este sea un año de reconstrucción. Eso sí, sólo puede ser uno. Porque la ventana de un campeonato se está agotando para Matt Ryan.

El propio Matt Ryan, al ser abordado por la prensa sobre los cambios en el equipo, ha señalado que está contento con la transición, que le encanta la energía y pasión con la que Quinn trabaja y que sobre todo le entusiasma trabajar con Kyle Shanahan (hijo del legendario Mike Shanahan) en la coordinación ofensiva. También señaló que es consciente de que los cambios nunca son fáciles, pero que confía en el equipo y el nuevo equipo para que este año sea de transición.

Pero, ¿en serio piensa Quinn que este será un año de reconstrucción? Para tranquilidad de Ryan, no parece que Atlanta haya terminado aún con la agencia libre, como el propio Quinn había señalado. Atlanta cuanta con ocho selecciones en el draft, pero hay muchas posiciones que podrían ser mejor cubiertas por jugadores veteranos. A todo esto, hay que añadir que los Falcons cuentan con mucho espacio dentro del límite salarial – unos 20 millones de dólares - y que Atlanta es un destino atractivo para cualquiera. Hay que tener en cuenta que la gran mayoría de jugadores profesionales en Estados Unidos fijan sus residencias en Los Ángeles, Miami o Atlanta.

Lo que podría llegar a ser el bombazo de la agencia libre es que Atlanta sería uno de los posibles destinos de Adrian Peterson, si es que los Vikings al final se decidiesen a un intercambio. El precio que pedirían desde Minneapolis es alto, pero los draft picks de Atlanta son un buen aliciente para sentarse a negociar (Atlanta tiene las selecciones 8, 42, 73, 107, 146, 185, 225, 249).

Si se confirma que Atlanta está detrás de Peterson, tendría mucho sentido que Quinn y Dimitroff dejasen tanto espacio libre en el límite salarial.

Junto a Devonta Freeman, Peterson podría formar uno de los ataques terrestres más temibles de la liga. Si es verdad que Atlanta en serio busca atraer a Peterson, se confirmaría que Quinn no piensa realmente que será un año de reconstrucción sino que con lo que tiene puede ir a por todas basando su juego en sus running backs. Con esta estrategia se puede manejar mejor el tiempo y le da una mano a la defensa en sus labores.

Por ahora todo son especulaciones. El destino de Peterson parece que sea Dallas. Atlanta tendría que ofrecer alto para convencer a Minnesota y también al running back que valdría más la pena irse a Atlanta que a su tierra de origen, Texas. Aunque no sea así, el comienzo del mandato Quinn en Atlanta tiene muy buena pinta de cara al futuro, no necesariamente esta temporada. No se puede decir lo mismo de Dimitroff, que ha fichado a su excompañero de los Patriots, Scott Pioli, para ayudarle a convencer la franquicia de que él no era parte del problema. Lo que está claro es que la NFL Sur está abierta para quien la coja por los pelos.