CAMINO A LOS ÁNGELES
Los contribuyentes de Saint Louis no pagan por un nuevo estadio
La empresa de Stan Kroenke, dueño de los Rams, ya ha diseñado un complejo deportivo para dos equipos en Los Ángeles, lo que indica el futuro de la franquicia con claridad.
Los contribuyentes del condado de Saint Louis han dicho no a pagar 6 millones de dolares para la construcción de un nuevo estadio en el entorno de la ciudad. El proyecto de este nuevo estadio se considera imprescindible para mantener a los Rams en esta gran urbe del estado de Missouri.
La decisión es sintomática de la desafección, creciente, entre los ciudadanos, los que pagan impuestos, y los dueños de franquicias NFL que, de manera continua, exigen contraprestaciones y dinero para mantener los equipos en sus respectivas ciudades en un ejercicio muy parecido al chantaje. Más aún en el caso de los Rams pues su dueño, Stan Kroenke, ha puesto en marcha un proyecto unilateral para construir un estadio con capacidad para acoger a dos equipos NFL en Los Ángeles. No resulta creíble que la empresa de Kroenke, la constructora HKS, vaya a afrontar una obra de esta envergadura, casi dos mil millones de dolares, sin llevarse a su propio equipo a jugar allí.
La cantidad que se niegan a pagar los vecinos de Saint Louis no es significativa. El proyecto del nuevo estadio en la ciudad tiene un presupuesto de 985 millones de dolares, por lo que 6 más o menos no se pueden considerar como algo demasiado importante en el aspecto puramente material, pero sí en el sentimental.
Es una nueva noticia que indica que el futuro de los Rams está mucho más cerca de Los Ángeles que de su actual ubicación en Saint Louis.