El rugby español vive días de ilusión. Tras avasallar a Rusia y tutear a las mundialistas Georgia y Rumanía, España es tercera en el 6 Naciones B. Santiago Santos cuenta con unos 50 jugadores para preparar el reto del Mundial 2019. La clasifi cación se jugará en el próximo torneo (2017-18) pero los Leones se están armando con tiempo. Con anteriores seleccionadores se despertó polémica: Sonnes logró grandes resultados pero citando a demasiados jugadores nacidos en Francia. Su sucesor, Brice Bevin, rompió con lo anterior, desarmó el bloque y España casi desciende. Santos ha encontrado la fórmula perfecta: vienen menos, pero su rendimiento y currículum son mayores. Ante Alemania se dará el mayor paquete de galos (nueve citados) pero en partidos anteriores no hubo más de cinco titulares. Ruiz y Grammatico harán su debut mañana.
Destacan tres hombres que militan en el Top14 francés, la liga europea más potente. El talonador Beñat Auzqui (Burdeos), el tercera Thibaut Visensang y el medio melé Guillaume Rouet (ambos del Bayona), que nacieron a pocos kilómetros de la frontera, pero con sangre hispana de sus antepasados. También está Julen Goia, último español (Irún) en ser titular en Top14 (el año pasado con Biarritz). Auzqui, el más veterano, ve positiva la política actual: “Mi equipo está muy tranquilo cuando vengo. Pero a otros como Gibouin (con experiencia en Top14 y capitán de los Leones), Ascarat o Pelluchon les ponen pegas”.
Crecer. “Cuantos más profesionales vengan será más factible ir al Mundial. A los chicos nacidos en España sólo les falta experiencia en ligas fuertes”, apunta Auzqui. Para Rouet, “jugando así los clubes se verán obligados a ceder a sus jugadores. Podemos cambiar el nombre de España”. Los cuatro coinciden: “España puede ir al Mundial de Japón, éste es el camino”. Lo primero son los resultados, y que el bloque crezca. Visensang vive “una gran experiencia”: “Juego con amigos. Vamos todos en el mismo sentido”. La implicación es total y Goia confesaba que Rouet le dijo ante Rusia que sentía “mariposas en el estómago” cuando vio a 7.000 personas. No le pasaba en su club: “Todos desean venir, ven posible jugar un Mundial”.
Santos parece haber encontrado la mezcla perfecta: franceses con raíces españolas que vienen a España y valores nacidos aquí que emigran y crecen en las categorías inferiores galas. “Ir a la Pro2 (segunda) o Federal 1 (tercera) es importante para que cojan la experiencia que ya tienen georgianos y rumanos” afirma Auzqui. Goia es el mejor ejemplo de esa ‘fuga de talentos’: “Me fui a Biarritz hace tres años y descubrí otro mundo. Es la universidad del rugby. Somos unos cuantos allí y cuando venimos con los Leones notamos que nuestro nivel mejoró”.