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VELA

Iker: "La quinta etapa es la esencia de la Vuelta al Mundo"

Sus compromisos de preparación preolímpica en la clase Nacra 17 le han tenido lejos de la competición. Ahora vuelve a su puesto de patrón en el ‘Mapre’.

Auckland
Iker Martínez.

Tres meses después de finalizar la segunda etapa vuelve Ud. como patrón en la quinta, la más larga y quizás la más dura de esta edición. ¿Cómo lo afronta?

—Con muchas ganas porque es una etapa muy bonita y la verdad es que la VOR con el cambio de ruta ha perdido gran parte de la navegación con viento duro, que es la esencia de esta regata.

¿Es una etapa especial?

—Estas etapas son las que los regatistas quieren hacer porque es la esencia de la vuelta al mundo. A mí también me pasa, me motiva más, y además es un momento importante, las cosas han ido mejorando mucho y ahora estamos en una posición mucho mejor. Obviamente hasta ahora ningún equipo ha ganado dos etapas seguidas, por lo tanto es difícil, es complicado que podamos ganar la siguiente, y lo sabemos; es difícil estar en el podio y es un reto importante.

¿Cree que es justa la quinta plaza de la general que ocupa el “MAPFRE”?

—Obviamente la plaza en la que estamos la marcan los puntos que tenemos, y los puntos son los que son. Es totalmente justa a día de hoy, es un cálculo matemático y no hay nada que objetar. Como hemos visto en las últimas tres etapas de cuatro, hemos hecho cuartos o mejor en todas ellas, ahora estamos probablemente a un nivel superior, pero al final la general es la media de todas. Tenemos que seguir intentando hacer posiciones más altas para subir un poco más y ahí estamos.

¿Qué le ha faltado al equipo hasta ahora?

—Tiempo. Éramos conscientes desde el principio.

¿Cree que la quinta etapa puede ser clave para el futuro del ‘MAPFRE’ en esta edición?

—Creo que no, La que fue clave fue la segunda, porque fue donde habiendo empezado muy justos reaccionamos sobre todo eso y a partir de ahí hemos seguido la misma línea. Ésta de ahora es una etapa importante, pero no es ni más ni menos importante que la cuarta. No estamos en una etapa clave, estamos en un momento en el que queremos dar continuidad al primer podio y hay que seguir apretando.

¿Es difícil cambiar el chip de la preparación preolímpica en el Nacra 17 con el de las regatas transoceánicas?

—Sí, es complicado, pero es mucho más complicado cambiar el chip de la vuelta al mundo a la vela olímpica. Yo ahora vengo al barco grande y el equilibrio no es tan importante, es más fácil en ese sentido. Me reincorporo y es cambiar una pieza de un montón de piezas. En el barco pequeño se cambia una pieza de dos. El cambio es muy grande y más en este caso, donde cambiaba de tripulante en el Nacra 17. En dos meses hemos mejorado una barbaridad.

¿Tan dura es esta edición de la Volvo o para Ud, las anteriores lo han sido más?

—En esta edición ha habido muy poco viento en comparación con la anterior para cuando llegamos aquí. De lo que estoy seguro es que esta quinta etapa va a ser más complicada para nosotros que en la anterior vuelta al mundo porque tenemos un equipo que no ha estado entrenando dos años y vamos a tener que enfrentarnos al océano Sur estando menos entrenados. Va a ser una etapa muy dura, no tengo duda.

¿El competir con barcos iguales hace que el trabajo de las tripulaciones sea más importante?

La realidad es que los barcos no son tan iguales. Los monotipos no son iguales, tienen una misma regla para todos, pero no significa que sean iguales. Estamos viendo que la velocidad de los barcos no es igual. Los que hemos competido mucho en monotipos lo hemos pensado desde el principio y estamos viendo que hay diferencias. Unos barcos van mejor en unas condiciones y otros en otras. No son tan iguales. Pero es cierto que el equipo humano es importante.

En enero debutó ud. en la preparación preolímpica con su nueva compañera, Marina López, en la gira por Estados Unidos. En tres pruebas lograron la medalla de plata en el campeonato de Norteamérica. ¿Es un balance positivo?

—Es un balance positivo y mejor de lo que nunca hubiésemos pensado. Algunas cosas las hemos hecho mucho mejor de lo que pensábamos y otras peor, pero en general es superpositivo.

¿Ha notado el cambio de compañera?

—Marina es una chica que había competido, pero no mucho a nivel profesional. Es un gran salto. Para ella ha sido duro, pero hemos estado más arriba de lo que yo habría pensado. Hemos dedicado mucho tiempo a volver a crear el equipo porque hemos perdido no sólo el equipo que regatea —porque ahora navego con Marina y no con Tara—, sino que también hemos perdido al entrenador. Nos hemos encontrado con muchas dificultades y hemos dedicado mucho tiempo a gestionar todo eso: un nuevo entrenador, cómo crear un nuevo equipo… Nos ha llevado tiempo, ha sido difícil y poco a poco iremos avanzando.

En el Mundial de Nacra 17 de Aarhus (Dinamarca), que se disputará del 3 al 11 de julio próximo hay tres plazas para Río 2016. ¿Cómo lo afrontan?

—El Mundial lo vamos a preparar lo mejor posible. Hoy por hoy es imposible ganarse la vida haciendo la campaña olímpica y además, aunque no te ganes la vida con ello, es imposible llegar a tener dinero suficiente para comprar el material que hace falta e ir a las regatas. La Federación no nos puede ayudar. Sería inviable. Respecto al Mundial, la parte buena de que navegue también Fernando Echávarri (ahora con Tara Pacheco) es que hay más posibilidades de que España gane la plaza porque somos más tripulaciones.

¿La gran oportunidad para el Nacra17 español se perdió en Santander?

—No, ni mucho menos. Santander era un Campeonato del Mundo, una regata como cualquier otra. Todos preferimos ser campeones del Mundo en lugar de campeones de Europa, por ejemplo, pero no por eso se perdió ninguna gran oportunidad.

¿Se perdió la clasificación? Sí. Pero la realidad es que tuvimos un año en el que fuimos mejorando con ciertas lesiones y sufrimos una lesión justo antes del Mundial.¿Le ha servido como experiencia de un año y medio junto a Tara Pacheco, que ahora compite junto a Fernando Echávarri contra ud.?

—Por supuesto. Yo he aprendido muchísimo en año y medio y sin duda es el comienzo de todo y ha sido fundamental. Sin ese año y medio no podríamos estar regateando ahora al nivel al que lo hemos hecho. Yo he aprendido muchísimo y eso es muy importante para ahora y para el futuro.

¿Qué planificación tiene hasta los Juegos o se plantea ya ganar la clasificación para la clase en el Mundial de Aarhus?

—El planteamiento no varía se gane o no la clasificación en Aarhus. Creo que se va a ganar la plaza, pero si no se ganase tampoco cambiaria la planificación. Nuestro plan es aprender lo más rápido posible y para eso no tenemos en cuenta la plaza. Sólo queremos aprender más rápido porque tenemos a los italianos y a los franceses un paso por encima de todos y hay que cogerles. Ésa es nuestra mentalidad.