MONTAÑISMO | CUMBRE DEL NANGA
Txikon renuncia a la cumbre tras un fallo de orientación
"Hemos pasado de largo el corredor por el que teníamos que haber subido", señaló Txikon cuando estaba a 8.000 metros de altura. Ha renunciado a seguir.
Un error al orientarse cuando ya habían llegado a los ocho mil metros ha frustrado esta madrugada el primer ataque del vizcaíno Alex Txikon y sus compañeros a la cima del Nanga Parbat (8.126 metros), por lo que han regresado al campo 4. En principio lo iban a intentar de nuevo a partir de esta noche, pero a media tarde de este viernes 13 se conoció que renunciaban a intentarlo y que volvían al campo base.
Txikon, con diez 'ochomiles' en su haber, buscaba ser el primer montañero en hollar en invierno el Nanga (Pakistán). Le acompañaban en su aventura el local Muhammad Ali Sadpara y el italiano Daniele Nardi.
Según ha narrado su equipo de apoyo, tras alcanzar este jueves el campo 4 (a 7.200 metros), a las dos y media de la madrugada han partido hacia la cumbre. A pesar del frío extremo, los montañeros hablaban de nieve muy buena y de una pendiente de unos 30º de inclinación que no precisaba instalar cuerda para asegurarse. Esta última etapa de la ascensión, al margen de la obligada fatiga por los días de esfuerzo acumulado y la falta de oxígeno, no entraña mayores dificultades técnicas en comparación con jornadas anteriores.
La sorpresa ha llegado a las siete y media de la mañana. "No sé si nos podéis ver pero estamos como a 8.000 metros", ha contado Txikon al campo base. En efecto, los prismáticos permitían comprobar que Alex Txikon, Ali Sadpara y Daniele Nardi avanzaban en travesía hacia el este a una altura muy superior de lo que cabía esperar para esa hora.
Pero veinte minutos después, Txikon se ponía en contacto de nuevo con el campo base para anunciar que se volvían al C4 (7.200m). "Hemos metido la pata, nos hemos equivocado. De noche y a oscuras hemos pasado de largo el corredor por el que teníamos que haber subido. Hemos seguido avanzando en travesía, demasiado. Estamos a 8.000 metros, pero en un punto muy rocoso desde donde es imposible tirar para arriba; tampoco tenemos margen de tiempo ni fuerzas para retroceder y rectificar", ha señalado.
De modo que han decidido descender hasta el C4 (7.200) a donde han llegado en escasa hora y media. Ahí tenían previsto descansar e hidratarse para volver a intentarlo a partir de esta noche, pero finalmente han renunciado. Hay que tener en cuenta que los tres están solos en la montaña, no hay ningún montañero más en la zona ni nadie que haya subido antes —de hecho, al llegar a los ocho mil metros ya han subido más arriba de lo que nadie nunca ha logrado en invierno en el Nanga—, por lo que dependían de ellos mismos.