Objetivo Lavillenie: cuarto oro europeo y récord mundial

Cuatro saltos en pértiga por encima de los seis metros, el más alto de 6,02, y dos intentos fallidos sobre su propio récord mundial (6,16). Es el equipaje con el que el francés Renaud Lavillenie ha llegado a Praga. Será la gran estrella del continental. Tiene dos objetivos en la capital checa: sumar un nuevo oro, que sería el cuarto, y añadir al menos un centímetro a su plusmarca. “Estoy en buena forma y pocas veces me he encontrado tan seguro de hacerlo muy bien”, dice, aunque está alerta: “El polaco Piotr Lisek puede ser peligroso, porque ha saltado ya 5,90 metros”.

Dafne Schippers. Es la reina de la velocidad europea, con 7.09 en los 60 metros. El año pasado se coronó campeona continental al aire libre tanto en 100 como 200. Ahora tratará de cambiar el bronce de hace dos años en Gotemburgo por el oro de Praga.

Pavel Maslak. La gran esperanza blanca de los 400 metros. El checo ha corrido las dos vueltas la pista en 45.27, mejor marca mundial del año, que le sitúa con casi un segundo de ventaja sobre el siguiente en este continental, su compatriota Jan Tesar (46.21). Es campeón mundial y europeo en pista cubierta.

K. Johnson-Thompson. Tiene 22 años y competirá en el pentatlón sin haber hecho marca esta temporada, pero llega en gran forma. Ha batido los récords británicos de altura (1,97) y longitud (6,93), marcas con las que podría aspirar a medalla en estas disciplinas. Pero en Praga la combinada es su único reto.

Homiyu Tesfaye. El rey mundial de los 1.500 metros en la presente campaña, con 3:34.13, por delante de los kenianos. Nació hace 21 años en Etiopía, pidió asilo político en Alemania en 2010 y corre con este país desde 2013.