TURF
Un cara a cara Hinojosa-Faina, única solución al turf
El pacto de aceptar a Fomento como ente regulador hasta su completa disolución implicaría la retirada de querellas y negociar de forma pacífica cualquier indemnización.
El conflicto que tiene paralizado el desarrollo de las carreras de caballos en España puede llegar a su fin. Para que haya carreras de forma inmediata, la única solución pasa por un cara a cara entre Felipe Hinojosa y Faina Zurita, presidentes de la Sociedad de Fomento (SFCCE) y del hipódromo de La Zarzuela (HZ). Según ha podido saber AS, si HZ acepta a SFCCE como ente regulador del turf hasta su completa disolución (está en proceso de liquidación concursal), ésta garantiza que no reclamará cantidad alguna por los derechos de imagen con carácter retroactivo (desde 2005) y se presta a un pacto pacífico para negociar la retirada de la querella criminal que tiene interpuesta contra la presidenta de HZ y otros dirigentes.
Ahora falta por conocer si las palabras son refrendadas con buena voluntad por parte de ambas partes, pues de algún modo significaría reconocer que tanta razón tenía uno como otro, o que ambos cometieron errores.
En caso de no mediar acuerdo, la única solución estaría abocada a esperar a que el juez dictamine la completa disolución de la SFCCE, proceso que, según han confirmado a AS, podría alargarse exactamente hasta enero de 2016. Es decir; diez meses más sin carreras de caballos en España.
La querella viene interpuesta por la venta de los derechos audiovisuales por parte de HZ a SELAE por tres millones de euros correspondientes al periodo de 21 de enero de 2013 a 31 de diciembre de 2014. Esos tres millones más el IVA y la producción televisiva eleva el montante a 5,5 millones. Sólo serían reclamables los tres millones inicialmente detallados, y siempre que un juez les diese la razón.
Para la SFCCE, el escenario idílico para su situación sería la cancelación de su deuda (unos 2,5 millones), ser aceptada como ente regulador y facilitar su transformación en un moderno Jockey Club en el que estarían representados todos los sectores del turf. Siendo esa petición nada probable y casi imposible, estarían dispuestos a un acuerdo pacífico en el que la compensación sería muy menor a las cifras oficiales. La única condición esencial sería el reconocimiento de ser el único ente regulador oficial posible. La segunda parte del conflicto es la retirada de la querella criminal. Hasta que ésta no sea admitida a trámite por el juez, y aún no ha sido admitida, únicamente puede ser retirada por dos personas, el administrador concursal que lleva el caso, Eugenio Llamas, y por Felipe Hinojosa, que fue quien la interpuso. Por eso, sólo un acuerdo de voluntades entre Hinojosa y Faina, un cara a cara, permitiría dar luz verde a la celebración de las carreras de caballos de forma inmediata. Lo contrario sería fiarlo todo hasta enero de 2016.
Mientras tanto, sigue ardiendo el sector del turf, jockeys, preparadores, propietarios y aficionados que sin saber por qué se han visto privados a su derecho a tener una afición. Lo curioso del caso es que los acreedores principales de la SFCCE son la Seguridad Social y Hacienda (es decir, Estado), y que la entidad que debería pagar a SFFCE es SEPI (es decir, Estado). En definitiva, que si realmente quiero, me paso el conflicto del bolsillo derecho al bolsillo izquierdo y aquí paz y después gloria.