Adarraga: "Aceleramos de igual forma que en la Fórmula-1"

“Aceleramos de 0 a 100 kilómetros por hora en tres segundos, igual que una moto potente o un Formula 1”, contaba ayer Ricardo Adarraga en una cafetería de Grandvalira mientras en el exterior caían copos de nieve. El mal tiempo y el viento retrasó un día los Mundiales de kilómetro lanzado, que mañana deberían disputar sus calificatorias en la estación andorrana, si el tiempo lo permite. “Me he preparado seis pares de esquís y sólo he podido usar uno en entrenamientos”, decía apesadumbrado este madrileño, de 50 años, que reside en Alemania donde trabaja como ingeniero para HP.

Adarraga es el pionero español de la disciplina. Empezó por 2002 probándose en Les Arcs (Francia), pero su mejor resultado vino la temporada pasada, cuando estableció el récord nacional en 240.6 km/h, muy cerca del tope mundial de Simone Origone (252.4), favorito a la victoria en Grandvalira. “Lo fascinante de este deporte es que se deja incorporar elementos técnicos. Es como la Formula 1, llevamos traje de latex, un casco similar al de contrarreloj y alerones en la pantorrilla. Sin ellos es difícil pasar los 200 km/h. Pero la destreza del esquiador es fundamental”, dice Ricardo, que poco después se pone el casco y simula su posición de carrera. “Tienes miedo los días antes, pero en los 20 segundos de carrera no”.

Coincide con él, Jan Farrell, nacido británico y residente en Madrid desde niño. Debuta en la distancia tras ser campeón mundial y al ser multilingüe media entre los 96 competidores de 14 países que están en Grandvalira. Será difícil que lleguen a los 200 km/h (no se ha instalado la rampa especial), pero hoy Andorra mira con un ojo a sus elecciones municipales y con otro a este Mundial de KL. “Se ha hecho un gran esfuerzo”, dicen desde la organización.