Jonathan Joseph guía la fiesta inglesa ante una dignísima Italia

Inglaterra se dio un festín en Twickenham. El desenlace fue el esperado aunque el guion no transcurrió como muchos esperaban. Y es que su rival, la en teoría débil Italia llegó a anotar tres ensayos y demostró un rugby mucho más ilusionante que el del último año y medio. Pero el XV de la Rosa, muy superior, sólo pasó ciertos apuros en la primera mitad. En la segunda, Jonathan Joseph (que firmó dos ensayos en este choque) y sus compañeros salieron a por todas y en un cuarto de hora posaron el oval hasta en cuatro ocasiones en el área azzurri. Ambos tuvieron motivos para salir contentos de Londres.

Italia salió con ganas de asaltar Twickenham. Sabía que el rival era claro favorito, pero debía limpiar su deteriorada imagen. Con un rugby muy serio y con mucho empuje logró un sorprendente ensayo a las primeras de cambio ¡jugando a la mano!. El capitán Parisse posó el oval y durante 20 minutos hizo temblar la 'azzurri' al templo de Twickenham. Mike Brown sufrió una conmoción cerebral terrorífica y tuvo que salir en camilla, lo que enfrió el choque (por suerte en la segunda parte se le vio recuperado en el banquillo). Luego Ford abrió el marcador local con un golpe de castigo, pero resistía Italia, que pudo hacer un segundo ensayo. Sin embargo la jugada clave fue el ensayo 'dudoso' que el TMO (juez de video) dio como válido cuando Billy Vunipola intentaba posar en una esquina pese al placaje de Gori. Eso despertó a Inglaterra, que escasos segundos después encontró de nuevo al eléctrico Joseph (tres ensayos en dos partidos) para romper la línea defensiva visitante. Con su 'try' se acabó la historia. Ford posó y el marcador se fue al 15-5. Antes del descanso Haimona tuvo dos golpes de castigo, uno sencillo y otro desde el centro del campo, pero falló ambos. No está Italia para perdonar. Sí puede hacerlo, por ejemplo, Inglaterra, que perdió un ensayo claro al pecar de egoísta May a escasos metros de la casa italiana.

Lancaster no quería sustos y el pack inglés salió a arrollar tras el intermedio. Primero fue un golpe de castigo de Ford, pero el primer ensayo de Morisi ponía nervioso a más de uno. Si Haimona hubiese transformado (horrible el apertura nacionalizado con el pateo) el marcador hubiese sido de 18-12, pero marró el golpeo. Inglaterra decidió que no estaba para sustos y tras otro 'golpe' de Ford llegó un ensayo de pícaro de Ben Youngs. Ahí se esfumaron las escasas opciones italianas. Otra gran carrera de Joseph, un 'try' de Cipriani (posó nada más entrar al campo) y otro del veterano Easter en un maul acabaron por reventar el duelo. Ya en los últimos segundos, y sacando todo su orgullo, Italia firmaría el tercer ensayo, de nuevo por medio de Morisi. Inglaterra suma su segundo triunfo y sigue fuerte a la espera de visitar Dublín en dos semanas (duelo decisivo), Italia sale reforzada para su duelo directo con Escocia. Todos satisfechos tras el duelo de Twickenham.