Sanción para Rita Jeptoo, que pierde medio millón de dólares

Justo dos días antes de que empiece a funcionar oficialmente la comisión antidopaje de Kenia, una de sus grandes atletas, la maratoniana Rita Jeptoo, que se encuentra entre las mejores maratonianas mundiales, ha sido sancionada con dos años de suspensión tras su análisis positivo con EPO.

La corredora del Valle del Rift es la atleta más destacada del país africano en sufrir este castigo, que le costará inicialmente medio millón de dólares, además del dinero que dejará de ganar en el futuro debido a su inactividad.

Los organizadores de la World Marathon Majors anunciaron ayer que le han retirado el premio como ganadora de la competición, que acoge a las maratones de Berlín, Boston, Chicago, Londres, Nueva York y Tokio, y para ganar la cual hay que puntuar durante dos años en algunas de estas pruebas.

Debía recibir la recompensa el próximo 1 de noviembre, durante la disputa de la carrera neoyorquina.

Jepto, de 33 años, ganadora en las carreras de Chicago y Boston, fue cazada en un control fuera de competición (los llamados por sorpresa) en septiembre pasado y no podrá competir hasta el 29 de octubre de 2016. Se perderá, pues, los Mundiales de Pekín 2015 y los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.

En todo caso, la atleta no acostumbraba a competir en grandes campeonatos, sino que prefería las carreras de maratón comerciales, con suculentos fijos de salida, buenos premios en metálico y liebres fabricadas casi a medida.

Jeptoo negó en un principio haberse dopado e incluso llegó a afirmar que los periodistas (que habían recibido información oficial) “mentían”.

El primer análisis dio positivo y el segundo, como es habitual, ratificó el resultado.

La Federación Keniana recibió dos veces en audiencia a la atleta para que se explicase, la última de ellas el pasado día 15, pero finalmente la ha suspendido por esos dos años. Si el positivo se hubiera producido a partir del 1 de enero, el castigo se hubiese duplicado.

Los éxitos de Kenia en mediofondo y fondo, tanto en hombres como en mujeres, se habían atribuido a las dotes naturales de sus atletas, que viven en gran altitud, pero en los últimos años los casos de dopaje han proliferado.

Este hecho hizo encenderse las luces rojas en la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) y en la Agencia Mundial Antidopaje (AMA). Se establecieron laboratorios sobre el terreno y se exigió a las autoridades kenianas una mayor implicación.

Hace algunas semanas, Kipchoge Keino, presidente del Comité Olímpico Keniano, se puso en contacto con las autoridades políticas de su país para iniciar la redacción de una ley penal que pudiese llevar a la cárcel no sólo a los inductores del dopaje (médicos, entrenadores, representantes…) sino a los propios atletas.

Este 1 de febrero entra en funcionamiento oficialmente la agencia antidopaje keniana, que ya ha recibido oferta de colaboración de sus homónimas de Noruega y China, país este último que ha tenido en le pasado graves y sonoros problemas con el dopaje.