El contragolpe de España maltrata a Noruega en Oviedo

Con las viejas armas de los nuevos tiempos, defensa y contraataque, España firmó una extraordinaria primera parte ante Noruega (22-9) para decidir el partido ante los nórdicos, maniatados por la movilidad del 6-0 español en el que Viran Morros, que regresaba, y Guardiola dominaron con facilidad. Luego, los relevos que introdujo Manolo Cadenas permitieron comprobar la variedad de soluciones que ha pensado el leonés para el Mundial de Qatar y vencer maltratando al rival por 38-20.

España, que a la contra es letal por la velocidad de sus extremos, movió el banquillo antes de tiempo porque al minuto Aguinagalde pidió el relevo por precaución, y no volvió a jugar. Andreu tuvo opciones en ataque y en defensa, en el centro con Morros, y así Maqueda, Cañellas y Raúl Entrerríos pudieron seguir de penúltimos.

Y en ataque, el puesto de central para Chema y para Mindegia, que tienen un corte ofensivo semejante, con esa quinta marcha que rompe a las defensas y genera situaciones de ventaja. Eso sí, con ellos al mando, Cañellas y Entrerríos pasan al lateral, la posición más coja de la Selección, y con el único especialista renqueante, Antonio García.

En la segunda mitad hubo momentos de 5-1, y hasta para que Virán Morros tuviese minutos de lateral, algo que no ha pasado en la Selección, porque el barcelonista siempre ha atacado en la primera oleada del contragolpe, omnipresente en defensa.