DE LA PISCINA A LA UNIVERSIDAD
“A la hora de estudiar, Mireia tampoco se escaquea”
La nadadora se examinó en la UCAM de dos asignaturas. Mireia: “Me sirve para evadirme, y encamino mi futuro”. Estudia Publicidad y Relaciones Públicas.
Ayer fue uno de los pocos días del año en los que Mireia Belmonte no se lanzó a la piscina. La reina del deporte español, la chica de 24 años que ha ganado 53 medallas en 2014, cogió a las 07:00 un avión en Barcelona, llegó a Alicante, se montó en un coche y apareció por la UCAM, la Universidad Católica San Antonio de Murcia, para examinarse de dos asignaturas y realizar prácticas del Grado en Publicidad y Relaciones Públicas que cursa a distancia.
Todo comenzó cuando José Luis Mendoza, presidente de la UCAM, vio a Mireia desorientada tras los Juegos de Londres 2012. Venía de ganar dos platas pero se vio envuelta en un conflicto con su club, el Sabadell, y se quedó sin licencia. “¡Localícenla, que la patrocino por completo!”, dijo a su gente. “Estaba en estado de depresión tras ganar dos medallas y eso no se podía consentir. Le pregunté qué le motivaba y se matriculó en Publicidad”, recuerda el presidente. Fue el inicio de la fructífera relación entre el Comité Olímpico Español y la UCAM, que otorga becas y ofrece estudios gratis a medio centenar de deportistas de élite.
Mireia primero pasó por el examen de Teología I, asignatura troncal por el carácter católico de la institución. Luego, Creatividad en Comunicación.
“Cada deportista tiene un tutor y funcionamos con una plataforma online, correos, mensajes y conversaciones por teléfono. El tutor es quien trata con el resto de profesores para marcarles el ritmo. El objetivo es adaptarnos nosotros. Con Mireia, se nota cuándo tiene más tiempo. Ella reserva hora y media por las tardes a estudiar y diez días antes del Mundial de Doha me escribió para demandarme más carga. Yo en el aula he presentado a sus compañeros alguno de sus correos para demostrarles que en los estudios tampoco se escaquea del trabajo”, explica Luis Emilio, el profesor de Teología.
Su tutora es María Miralles, que califica a Mireia como “sorprendente”. La exigencia en los entrenamientos de Fred Vergnoux se ha contagiado al resto de su vida. “La responsabilidad que demuestra es de un grado alto. Una noche, a las 22:30, después de haber batido un récord del mundo y teniendo que levantarse al día siguiente a las 05:00, en vez de relajarse me contactó preocupada porque me tenía que enviar una práctica”.
“Los exámenes han salido bien... Pero cuesta porque llevaba ya tiempo sin hacerlos”, se sinceró Mireia, que pasa por Murcia tres o cuatro veces al año. “Me sirve para evadirme de la natación y voy encaminando mi futuro. Mi deporte no da para vivir de los éxitos toda la vida”. Fuera del agua, Mireia también avanza.