“Me encantaría ganar este Premio Promesa de AS”

Sara Rodríguez (Carbayín, Pola de Siero, 1996) es la mayor promesa del judo español. Lo dice su palmarés. Bronce en el Mundial cadete en Miami. Dos veces campeona de España. Tres oros en Europa. Bronce en los Juegos de la Juventud 2014... Pero es, sobre todo, por cómo se transforma cuando pisa el tatami. Fuera es responsable, aplicada. Dentro, manda su instinto de guerrera.

“El judo en España ha vivido una generación de oro y me gustaría abanderar la mía”, dice siempre. Y por eso en 2014 cambió su Asturias del alma por Brunete. Y por eso se brega cada día cinco horas entre chicos, a las órdenes del seleccionador Quino Ruiz, mientras estudia Fisioterapia.

Lo que a Sara más le gusta del judo, cuenta, es “el respeto y la disciplina que te inculca”. Ella comenzó a los tres años. Se apuntó con su hermano Saúl, en un gimnasio que estaba al lado de su casa. A la vez, también, hacía natación y atletismo. A los 12 se decantó. Sólo judo. Ahora, a los 18, Isabel Rodríguez y su entrenador, Quino Ruiz, son sus espejos. La meta es Tokio. “Río 2016 lo considero aún muy pronto. Queda año y medio para que acabe la clasificación y yo estoy más centrada en junior. Pero nunca se puede descartar...”, comenta.

Ojalá antes, ahora, ganara el Promesa de AS. “Me lo dijeron las madres de los niños del club y me quedé muy sorprendida. El judo no es un deporte muy mediático. Me alegró mucho”. Por ella. Por lo logrado ya. Pero aún más por aquellos que están siendo su bastón en este camino: sus padres, Quino, su Club de Brunete. “Y me encantaría ganarlo. Por ellos, para dedicárselo”.