El Granollers obra el milagro en los últimos cinco minutos

Un gol de Ferran Solé en los últimos segundos del partido culminó el milagro del Granollers, que se clasifica para la fase de grupos de la EHF, tras remontar al Sporting Clube de Portugal el 27-25 de la ida, en los últimos cinco minutos, cuando la eliminatoria parecía absolutamente perdida.

El 25-23 final clasifica a los catalanes para la siguiente ronda al haber encajado menos goles en casa. Sin embargo, la gesta de esta noche no fue igualar esos dos tantos de diferencia del partido jugado en Lisboa, sino el 18-21 que obraba en el marcador a falta de cinco minutos para el final en el choque de hoy en tierras catalanas.

Con el Granollers prácticamente desahuciado, un milagroso último parcial de 7-2 dio la vuelta al partido y le permite seguir vivo en la segunda competición continental.

El Sporting empezó el partido marcando un ritmo muy rápido y potente, para intentar conseguir un marcador alto y así obligar al Granollers a ganar por más de 2 goles si quería clasificarse.

El inicio fue sorprendente, porque los portugueses empezaron con un parcial de 0-2 que obligaba al Granollers a reaccionar si no querían que se les pusiera cuesta arriba la eliminatoria desde los primeros minutos.

Los portugueses consiguieron mantener esta diferencia de 2 goles arriba hasta llegar al ecuador de la primera mitad. A partir de este momento, el Granollers ajustó su defensa y puso un punto más de agresividad en la línea de 6 metros. El jugador del Granollers, José Toledo, empataba el partido por primera vez (7-7, min.17), y Nicklas Grundsten adelantaba a los catalanes al siguiente minuto (8-7, m.18).

El Granollers mejoraba conforme pasaban los minutos, y consiguió un parcial de 6-1 (10-7, min.25) que le ponía con la eliminatoria a favor y con muy pocos goles encajados en el marcador. Al final se llegaba al descanso con 12-9 en el electrónico, y con un Granollers con mejores sensaciones que el Sporting.

En la reanudación, los catalanes salieron de la misma manera que habían terminado el primer período, y lograron aumentar la diferencia a 4 goles en los primeros 5 minutos (14-10, min.35).

Pero los portugueses no querían darse por vencidos y empezaron a ser muy efectivos en ataque, al contrario que el Granollers, que se atascaba mucho en las líneas ofensivas.

El Sporting consiguió dar la vuelta al partido después de un parcial de 1-5 (17-18, min. 51), y la eliminatoria se ponía muy cuesta arriba para los catalanes hasta llegar a los últimos 4 minutos de encuentro, cuando el Granollers volvió a empatar el partido a 21.

Fue a partir de este momento que el técnico local, Carlos Viver, cambió la defensa a individual, para intentar remontar y clasificarse, con el tiempo y el marcador en contra.

Se llegaba a la última jugada de partido con 24-23 en el marcador y faltaban solamente 15 segundos para la conclusión. Viver pidió tiempo muerto para preparar la jugada con una clara indicación: "tiene que haber lanzamiento".

Un gol clasificaba al Granollers, y Ferran Solé fue el encargado de hacer entrar en la historia al conjunto catalán y clasificarlo para la fase de grupos de la EHF, después de anotar un gol desde el extremo derecho.