España aguantó el ritmo de Brasil durante cuarenta minutos

La selección femenina de Brasil, actual campeona del mundo, se alzó con el triunfo final en el Torneo Internacional de España disputado en la localidad malagueña de Fuengirola, tras imponerse este domingo por 20-24 al equipo español, que pese a su empeño, tan sólo pudo aguantar durante cuarenta minutos el ritmo de las vigentes campeonas del mundo.

El tiempo que aguantó físicamente la primera línea del conjunto español, lastrada por las ausencias de la central Macarena Aguilar, aquejada de una pubalgia, y de la lateral Beatriz Fernández, que tuvo que abandonar el pasado miércoles la concentración por el fallecimiento de su padre.

Todo un problema para la selección española, que incapaz de encontrar todavía un relevo de garantía a las ya retiradas Begoña Fernández y Verónica Cuadrado en el pivote, depende en exceso del rendimiento ofensivo de una primera línea, que hoy sin apenas relevos, acabó exhausta ante el brasileño el fornido equipo brasileño.

Un cansancio que propició la aparición de las imprecisiones y pérdidas que el conjunto español había logrado evitar en una magnífica primera parte, en la que las de Jorge Dueñas, dominaron en todo momento un marcador, que llegó a reflejar una máxima de tres goles (9-6) para el equipo español.

Pero sí en el primer período, que se cerró con una ventaja de un gol (12-11) para España, las "guerreras" tan sólo concedieron tres pérdidas de balón, las de Jorge Dueñas ya acumulaban el mismo número de errores apenas cumplido el ecuador de la primera segunda.

Hecho que no tardó en aprovechar Brasil, liderado en ataque por una magnífica Ana Paula, autora de doce goles, seis de ellos de penalti, para situarse a los 46 minutos de juego con una renta de tres goles (15-18), que dejó prácticamente encarrilado el triunfo del conjunto sudamericano.

Una derrota a la que España se resistió, pero el cansancio de Nerea Pena, extraordinaria en el primer período, Marta Mangué y Alexandrina Barbosa convirtió en un suplicio cada ataque del equipo español hasta el final de la contienda.

Problemas que no tardaron en trasladarse a la defensa, que careció en los segundos treinta minutos de la frescura de piernas y las constantes ayudas, que le habían permitido contener al ataque brasileño en la primera mitad.

Circunstancia que permitió a Brasil gozar en el segundo período de hasta seis penas máximas, por tan sólo un penalti concedido por España en el primer tiempo, que la infalible Ana Paula no desaprovechó para garantizar el triunfo (20-24) a las vigentes campeonas del Mundo.

Una derrota que, sin embargo, no debe empañar la buena imagen dejada durante cuarenta minutos por una selección española, que en principio podrá contar el próximo domingo ante Polonia en el arranque del Campeonato de Europa tantos con Beatriz Fernández como con Macarena Aguilar.

Dos buenas noticias para el equipo español que como demostró durante todo el torneo volverá a contar en Hungría y Croacia, sedes del Europeo, como principales armas con una sólida defensa, además de su ya consabido irreductible carácter, con los que intentará paliar el problema en que se ha convertido la posición de pivote.