Sochi 2014 - Hockey Femenino
Canadá remonta ante EE.UU. y mantiene la corona del hockey
La selección femenina canadiense ganó 3-2 una final de los Juegos de Sochi que tenía prácticamente perdida y conquistó su quinto título olímpico consecutivo.
La selección de hockey sobre hielo femenina de Canadá ganó hoy una final de los Juegos de Sochi que tenía prácticamente perdida ante Estados Unidos y conquistó su quinto oro olímpico consecutivo.
Las canadienses perdían 2-0 a falta de cinco minutos, pero lograron empatar en un infartante tramo final y se impusieron por 3-2 en la prórroga gracias al gol de oro anotado por Marie-Philip Poulin en el minuto 69.
Canadá ganó cuatro oros de los cinco que se pusieron en juego desde que el hockey sobre hielo femenino entró en el programa olímpico en Nagano 1998, cuando se impuso su rival de hoy. Suiza se quedó con el bronce al vencer a Suecia 4-3 en el partido por el tercer puesto.
Estados Unidos, que rozó su segundo metal dorado, se adelantó a los 32 minutos por medio de Meghan Duggan y Alex Carpenter amplió distancias en el 43.
El oro estaba en las manos de Estados Unidos, pero las canadienses lograron lo que parecía imposible. Era el minuto 56, faltaban sólo cuatro para acabar, y la diferencia de dos goles se antojaba insalvable.
Brianne Jenner dio algo de oxígeno a los exhaustos pulmones canadienses con un tanto en el minuto 57. Canadá creía que era posible y la seleccionadora cambió a su portera por una jugadora de campo en busca del milagro.
La clave del partido llegó segundos después, cuando una jugadora estadounidense lanzó un "puck" desde su propio cambio. Enfrente esperaba el arco de Canadá, libre, sin portera que detener el disparo. El destino fue caprichoso con el equipo de barras y estrellas: el disco se deslizó por el hielo del Bolshoy y chocó con un poste.
Las estadounidenses sabían que la suerte ya no estaba con ellas y Poulin se encargó de recordarlo. La jugadora marcó el tanto del empate cuando ya sólo quedaban segundos tras recibir el "puck" libre de marca apenas a un metro del arco rival.
La prórroga fue desordenada, con exclusiones constantes por ambos lados y con ocasiones que no materializaron hasta que apareció otra vez Poulin.
Con una jugadora más sobre el hielo, Canadá hizo valer su superioridad numérica para tumbar los sueños de Estados Unidos, un país que vio muy de cerca su primer oro femenino desde Nagano 1998.
Canadá y Estados Unidos, las dos principales potencias mundiales cuando se trata de jugar con sticks sobre el hielo, se volverán a ver las caras mañana en la semifinal masculina.
Dos asuntos quedaron claros: que las reinas del hockey femenino llevan una hoja de arce en su bandera y que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, le debe una caja de cervezas al primer ministro canadiense, Stephen Harper. Mañana, con los hombres, se conocerá el resultado de la segunda apuesta entre los mandatarios norteamericanos.