RUGBY | VI NACIONES
Una espectacular Irlanda apaga el fuego del Drágón galés
La campeona fue arrollada por el Trébol, que cortó las alas a los de Gatland. Superiores en delantera y touche, presentan candidatura al VI Naciones.
Irlanda pasa a ser claro candidato al VI Naciones. Su avalancha de rugby ante la campeona de las dos últimas ediciones así lo acreditan. Porque el Trébol dio un auténtico recital. Cortó la hegemonia del Dragón con una lección táctica y también a base de intensidad, de empuje. Desde el primer minuto Irlanda pasó por encima de una Gales a la que todavía se la espera en el Aviva Stadium. El VI Naciones es muy largo y permite todo tipo de combinaciones, pero los de Gatland salen tocados y sus vecinos celtas muy fortalecidos. El resultado (26-3) lo dice todo.
Como ya ocurriera el año pasado, Irlanda dio todo un recital en el primer tiempo. En aquella ocasión tiró de brillantez, esta vez no le hizo falta tanto. Porque Gales no andaba fina como se vio ante Italia... y eso ante el Trébol pasa factura. Fueron minutos plácidos, en los que los de Schmidt ganaban en delantera, dominaban el juego aéreo buscando un error de Halfpenny y cada vez que el oval se acercaba a la 22 irlandesa, era robado por los locales o se provocaba un golpe de castigo. Encima, Scott Williams se fue lesionado tras placar con fuerza a BOD (metáfora de lo que se venía) y North pasó al centro, donde quedó desapercibido. Un par de golpes de castigo anotados por Sexton abrián la brecha y un ensayo 'marca de la casa' finalizado por Henry el golpe definitivo. Presión a la esquina, Priestland sale con el balón del campo y la touche la gana Toner para formar un maul y a base de riñones de las 'cuatro orgullosas provincias de Irlanda' llegaba el primer try. Un 13-0 tan doloroso como realista. ¿Volvería el Dragón tras el descanso como en 2013?
Pues no, esta vez no. Lo intentó, fue mejor que en el primer periodo, pero Irlanda no estaba para sustos. Un golpe de castigo de Sexton ponía el 16-0, la vida seguía igual. Halfpenny pasó otro en el 55'. Un equipo como Gales no puede tardar una hora en anotar si quiere optar al VI Naciones. Irlanda seguía a lo suyo. Phillips, muy acelerado, trató de buscar el ensayo y dejó una situación franca que Rhodri Jones estropeó en la propia línea de marca por un arrastre de balón excesivo. No era el día del Dragón. Llovía en Dublín. Cada balón aéreo, fuera en la touche (impresionantes Toner y POC), o con patadas tácticas de Sexton buscando a Halfpenny y el resto de backs era un puñal directo al corazón de las esperanzas de Gatland. Se iba apagando el fuego galés, o mejor dicho, se encargaba Irlanda de hacerlo con su vendaval de rugby. No hizo falta brillantez ofensiva, que la hubo, sino también empuje. O'Mahony, Man of The Match, abortaba cada arreón galés y ya en el último suspiro Jackson redondeó la cuenta (26-3). El campeón dobla la rodilla... ¿Será el fin de su hegemonía? En el VI Naciones todo puede pasar. Pero esta Irlanda, es evidente, va muy en serio.