JUEGOS MEDITERRÁNEOS
Tarragona 2017 adelgaza por la crisis: de 150 a 90 millones
El Estado aumenta un año las ayudas fiscales a empresas para atraer inversión. "No nos han preguntado por la cuestión soberanista", dice el alcalde.
Tarragona obtuvo en 2011 la organización de los Juegos Mediterráneos para el 2017. Ya en plena crisis económica, a lo que luego se unió la derrota de Madrid 2020, la irrupción de los Juegos Europeos en el horizonte de 2015 y la cuestión soberanista en Cataluña. Un panorama complicado que ha hecho adelgazar el proyecto para garantizar la supervivencia. Josep Félix Ballesteros, alcalde de la ciudad, lo explicó en el Comité Olímpico Español junto a Alejandro Blanco tras la primera reunión de la Fundación, que debe garantizar ahora el presupuesto. “Avanzamos a buen ritmo en un entorno que no es fácil con las premisas de austeridad y sostenibilidad sin perder de vista el cumplimiento del programa deportivo”, dijo.
Del presupuesto inicial de 150 millones de euros (sin incluir Villa Olímpica, que lo elevaba a 287) se ha pasado a otro de 90: 47 correspondientes a inversiones (de instituciones públicas) y 43 de gastos operativos de los que se pretende que un 76% provenga de empresas privadas. Para echar una mano, desde el 1 de enero los Mediterráneos son Evento de Excepcional Interés Público, lo que permite desgravar hasta un 90% de la inversión. Lo serán de 2014 a 2017, haciendo una excepción a la norma de un máximo de tres ejercicios. Eso sí, queda definir qué cantidad aportará cada institución. El CSD ha exigido rebajas. “En cómo se concretan las inversiones y en qué periodificación es en lo que estamos”.
Al final, no habrá Villa Olímpica y los deportistas se alojarán en hoteles de Salou. Tampoco se remodelará el estadio del Nástic y muchas instalaciones serán ‘recicables’. “Estamos primando la rehabilitación sobre la construcción”, definió Ramón Cuadrat, su director general.
“Nadie del Comité Internacional de los Juegos (CIJM) nos ha preguntado sobre la cuestión soberanista oficialmente”, indicó Ballesteros, que sí admitió que el tema salió “en conversaciones informales”. En cuanto a los Juegos Europeos de Bakú 2015, “su respuesta es que el CIJM confía en Tarragona para dar impulso a los Mediterráneos”.