La intrahistoria
Una piedra en el camino: Tercer dardo de Alberto de Mónaco
El príncipe pidió el micro tras la exposición y lanzó su pregunta: "Se ha hablado mucho de un nuevo modelo de Juegos y su mensaje. Me gustaría que lo aclararan un poco".
Alberto de Mónaco, chinita en la carrera olímpica de Madrid, volvió a tener su minuto de oro, como en Singapur 2005 y en Copenhague 2009. El príncipe monegasco pidió el micrófono tras la exposición de España en Buenos Aires y lanzó su pregunta: "Se ha hablado mucho de un nuevo modelo de Juegos y su mensaje. Me gustaría que lo aclararan un poco". La candidatura ya había tratado ese tema en su presentación. "El mundo espera que los líderes sean responsables con los gastos. Nuestra propuesta es no utilizar el dinero ciudadano para enormes inversiones", le contestó Samaranch júnior. Más veneno tuvo lo que Alberto hizo en Singapur. Entonces, cuestionó a Gallardón por las garantías de seguridad después del estallido de una bomba de ETA junto a La Peineta. Una puñalada. Para borrar su mala imagen, volvió a intervenir en Copenhague. Esta vez, se interesó por el futuro de las instalaciones que España tenía aseguradas. El príncipe, miembro del COI desde 1985, siempre es protagonista. Ayer, también.