Mireia Belmonte ve "muy difícil" el podio en los 200 estilos

Mireia Belmonte tendrá una jornada ilusionante cuando despierte. Tras errar en el primer intento de final, al quedar novena en el 400 libre, hoy nadará por la mañana la semifinal del 1.500 y por la tarde la final del 200 estilos, prueba en la que parte con la quinta mejor marca después de haber superado las rondas de ayer (2:10.66). Deberá Mireia, si quiere aspirar a medalla, bajar de 2:10 para, al menos, pelearla hasta el final. Pero ella lo ve "muy difícil, casi imposible.

La china Ye y la húngara Hosszu son especialistas. El 200 es una prueba de velocidad, muy rápida. Intentaré hacer un buen papel". Ambas nadadoras protagonizarán una pugna extraordinaria por el oro y el récord del mundo de la estadounidense Ariana Kukors podría peligrar. Las cuentas de Mireia dejan huérfano el bronce, y es ahí donde podría colarse la badalonesa gracias al público. "Es increíble, cuando han dicho mi nombre han gritado. Te motivas", comentó la nadadora tras la primera jornada. Tendrá como principales rivales a la australiana Alicia Coutts, la estadounidense Caitlin Leverenz y la británica Sophie Allen. Mireia puede ser tercera u octava. La que baje de 2:10 será, muy probablemente, medallista.

La badalonesa nadará por la mañana los 1.500 libre junto a Erika Villaecija y la gran favorita, la campeona ayer de los 400 libre, Katie Ledecky. Ambas esperan alcanzar la final. "Ese sería mi sueño, repetir una final en el Sant Jordi, como ya ocurrió en 2003. Será difícil", explicó Villaecija.

El técnico de Mireia, Fred Vergnoux, cree que es en esta prueba en la que tiene más opciones. Pero eso será mañana, hoy toca el 200 estilos.