España renace ante EEUU y se medirá a Italia en cuartos

La Selección masculina de waterpolo ya están en cuartos de final: objetivo cumplido. Pese a quedar tercera de su grupo y mostrar dudas en su juego, este mediodía ante Estados Unidos ha ofrecido su mejor versión, más segura de sí misma, con una buena defensa y un ataque más acertado que el de estos días. España, siempre por delante a partir del minuto 4, fue superior a su rival y, en cuartos de final, le esperará Italia, subcampeona olímpica.

La Selección masculina comenzó enchufada, demostrando su potencial. Con una gran defensa, y pese a fallar un penalti con 0-0, los ataques comenzaron a carburar. La consiga del equipo era otra: finalizar todas las jugadas. Así Perrone marcó los dos primeros goles españoles (2-2), que igualaban los de Wigo y Azevedo. España iba al ataque con todo su arsenal y hasta en ocasiones hubo cinco lanzamientos en una misma jugada. Merrill Moses, el meta estadounidense, sujetaba a su equipo con varias paradas de mérito.

Molina y Español pusieron al equipo de Rafa Aguilar por delante (4-2), pero Estados Unidos siempre hizo la goma hasta el 5-4 del descanso. El choque comenzó a tensionarse, antesala de la batalla final que estaba por llegar, aunque los españoles pudieron sentenciaron en un buen tercer parcial, que además contó con la poca permisividad arbitral con Estados Unidos. Español y Molina pusieron un 7-4 que parecía definitivo. Más aun, cuando los de Aguilar tuvieron dos superioridades seguidas para ponerse cuatro arriba, pero las desperdiciaron y Wigo puso el 7-5 con el que se llegó al último cuarto.

El técnico estadounidense le pidió presión a sus jugadores, que atenazaron a los españoles. Azevedo marcó un penalti muy discutido, que puso el apretado 7-6 en el marcador. España cometió falta en ataque y los americanos atacaban para empatar. Para postre, dos exclusiones seguidas de los españoles convirtieron el ataque estadounidense en un seis contra cuatro. Pero se pusieron nerviosos y España defendió con uñas y dientes hasta que recuperó la pelota. En la contra, Molina marcó el 8-6 y dejó encarrilado el partido, hasta que un minuto después Marc Minguell lo mató (9-6). Español puso la guinda con el 10-6 la piscina Picornell fue una fiesta, tras vivir un auténtico partidazo.