Golovkin noquea a Macklin y mira a la esquina de Maravilla

Un ejercicio de demolición. Eso fue lo que ejerció Gennady Golovkin sobre Matthew Macklin hasta que en el tercer round un gancho de izquierda lanzado al hígado acabó con el inglés en el suelo, KO. De este modo, el kazajo instalado en Alemania conseguía retener su cinturón de campeón mundial del medio versión AMB. Pero también certificó su decimocuarta victoria seguida antes del límite, de los 27 combates que registra su carrera.

El MGM de Mashantucket, en Connecticut, el kazajo fue un vendaval que no paró de conectar golpes y que dejó a Macklin muy tocado hasta que llegó lo que el campeón mismo decidió como un "lucky punch", un golpe de suerte que no lo fue. Tantos KO's no pueden ser casualidad.

Golovkin acabó y enseguida le mentaron la posibilidad de intentar unificar los cinturores del medio. De medirse a Sergio 'Maravilla' Martínez por el del Consejo Mundial, organismo con el que el de Quílmes se ha reunido estos días para aclarar sus planes de futuro. "Yo soy campeón de división y esa es una de las metas. Debería ser una gran pelea pronto", dijo el kazajo de 31 años.

De momento, el argentino afincado en España aún restaña las heridas que le dejó la victoria frente a Martin Murray en el Fortín de Vélez donde acabó con la mano izquierda rota. En septiembre tiene previsto retornar a los entrenamientos, pero desde su equipo se mira con más agrado a Miguel Cotto, más comercial para la televisión y menos peligroso.