La pegada del Barça derrotó a un ElPozo Murcia que fue mejor

El Barça venció en el tercer encuentro de la final de la Liga y se coloca con 2-1 en la serie, a un sólo triunfo del título y con dos partidos en el Palau para lograrlo. Lo logró con holgura en el marcador del Palacio de los Deportes de Murcia (3-6), pero la diferencia en la cancha fue mucho menor. El encuentro lo decidió el acierto de los culés (al fin y al cabo es lo que cuenta), pero la sensación fue que los murcianos merecieron mucho más.

Porque, si uno se fija en el juego y en las ocasiones, ElPozo puso más de ambas tanto en el primer tiempo como en el segundo. Salió en tromba hasta el punto de que al minuto y medio de juego Paco Sedano (¡qué final la del portero del Barça!) había salvado hasta tres goles claros. El Barça se veía superado por el ataque de los de Duda hasta que, como siempre, apareció Torras.

El capitán del Barça está especializado en marcar a ElPozo (en la final de Copa, de Copa del Rey y en los tres choques de esta final), pero, lo que es más importante, lo hace cuando peor lo pasa su equipo. Un misil suyo tras saque de córner puso al Barça por delante.

ElPozo siguió a lo suyo, creando ocasiones guiado por Paulinho (por fin apareció)… pero fallándolas. Y en eso llegó el segundo del Barça, de Aicardo. El gaditano aprovechó una dejada de Fernandao para batir a Rafa y minar la moral de su rival. Tras el tanto, fueron los peores minutos de los de Duda, que mientras le daban vueltas a por qué perdían si habían tenido mejores ocasiones, les cayó el tercero, obra de Wilde, y pudo llegar alguno más.

El partido pareció que estaba terminado al descanso. El 0-3 parecía definitivo porque, aunque ElPozo había demostrado tener armas de sobra, nadie podía esperar que se levantara de tres mazazos como fueron los goles culés. Para colmo, tras la reanudación Duda sacó a Grello portero-jugador y un balón que cayó en las manos de Sedano, por si le faltaba algo que hacer en esta final, lo convirtió en gol desde su portería.

Entonces, con 0-4 en el marcador, ElPozo siguió atacando de cinco e inició lo que soñaba con que fuera una remontada épica. Y a punto estuvo de realizarla. Grello, con camiseta de portero, marcó y el Palacio volvió a confiar. Luego Álex, tras pase de Miguelín y jugadón de Adri, y Kike, en una falta, dejaban al Barça a tiro de piedra (3-4).

Pero la remontada no llegó y mucho tuvo que ver que ElPozo estrellase el balón en el poste… ¡hasta en cinco ocasiones! Y como el que perdona lo paga, dos fallos de circulación y sin portero acabaron con el balón en los pies de Lozano y Lin, que remacharon dejando al Barça a sólo un triunfo de su tercera Liga y con dos opciones en el Palau (viernes y domingo) para lograrlo.