MONTAÑISMO
Más de 60 españoles se han dejado la vida en el Himalaya
Desde 1971 que falleció Jordi Matas, numerosos montañeros españoles han perdido la vida en las montañas más altas del planeta. Edemas, caídas, aludes... complican el objetivo.
Con la muerte de Xevi Gómez, Abel Alonso y Áñvaro Paredes, son numerosos los montañeros que han perdido la vida en las últimas cuatro décadas en los Himalayas. La primera muerte de la que se tiene constancia es la de Jordi Matas en el año 1971. Desde entonces, nombres como Iñaki Ochoa de Olza, Tolo Calafat, Luis María Barbero, Rafael Guillén quedaron ligados para siempre a las tragedias en las montañas. Los edemas provocados por el mal de altura, pulmonares o cerebrales, como el de Ochoa de Olza, o los accidentes, como el sufrido por Garra al sufrir una rotura de tobillo, aludes y congelaciones son las principales causas de los fallecimientos:
1971. Fallece Jordi Matas
1982. Pere Aymerich, y Enric Font, fallecen cuando descendían del campamento 5 del Manaslu a 7.400 metros.
1985. Juan José Navarro resulta muerto al caer cuando iba en una cordada a 7.500 metros por la vertiente tibetana del Everest.
1986. Carlos Rábago muere cuando escalaba el Gasherbrum II (8.035 metros). Ese mismo año Pedro Alonso López resbala a 7.500 metros de altura poco antes de alcanzar la cima de Lhotse.
1987. Andrés Ferrer falleció cuando era trasladado desde el campo 3, a 6.800 metros, al campo 1 del Everest tras sufrir una caída el día anterior. Ese año también mueren Toni Sors, Segi Escalera, Frances Porras y Antoni Quiñones, mueren por un alud en la escalada del Lhotse.
1989. Año especialmente trágico para el montañismo español. Santiago Suárez Alonso, de 34 años, falleció al sufrir una caída de 250 metros, cuando se encontraba a 7.250 metros de altura en la escalada del Manaslu. Antxon Ibarguren pierde la vida pocos minutos después de conquistar la cima del Gasherbrum II al sorprenderle un alud. Los cuerpos de Francisco Salgado Rivera, Antonio Luis Galea Gordillo, José María de Miguel Renedo y su hermano, Pablo de Miguel Renedo, fueron encontrados por dos alpinistas alemanes que ascendían el Pumori. Y Quico Dalmases Cunill, de 31 años, desapareció en el Dhaulagiri, de 8.172 metros, cuando afrontaba en solitario la ascensión.
1990. Otro año especialmente duro. Myriam García, Jesús Eladio y Miguel Ángel Lausín, son localizados tras desaparecer en la ascensión al Meru Nort (6.450 metros). Además, Albert Ibáñez y Josep Grañó pierden la vida en el Hidden Peak. Poco después Rafael Gómez Menor es arrollado por un alud en el Everest. Para finalizar, este mismo año fallece Juan Martínez Selles en el Shisha Pangma (8.013 metros) por congelación tras verse sorprendido por una tormenta.
1991. Manu Badiola, de 36 años, fallece al sufrir una caída cuando descendía del Makalu.
1992. José Joaquín Goñi Azanza, cae al vacío en el Ama Dablan (6.812 metros), en el Himalaya nepalí.
1993. Antonio Miranda, de una expedición alavesa, pierde la vida al caer por una pared de dos mil metros de desnivel a una altura de 8.100 metros en el Everest.
1994. Atxo Apellaniz, integrante de la expedición de "Al filo de lo imposible" de TVE, muere por agotamiento en el campo base tras alcanzar la cumbre del K-2. Antonio López Almudévar, por su parte, fallece al sufrir una caída en el Nanga Parbat.
1995. Jordi Anglés sufre una caída fortuita en el descenso del K-2 y muere a 400 metros del campo base. En ese mismo monte fallecen Javier Escartín, Javier Olivar y Lorenzo Ortiz congelados a 8.000 metros de altura tras verse sorprendidos por una tormenta con vientos de más de 150 km/h. En el Everest muere este año Xavier Lamas, al ser arrastrado por un alud cerca del campo base.
1996. Manuel Álvarez Díaz cae tras romperse una de las cuerdas de sujeción durante el descenso del Gasherbrum I (8.069). José Luis Zuloaga se vio sorprendido por un alud en el Shishsa Pagma.
1997. Joan Colet Vila, muere mientras ascendía el Nanga Parbat.
2000. Félix Iñurrategi hizo cima en el Gasherburn II (8.035 metros). En el descenso cae despeñado y fallece.
2001. Juan Leza Cruz pierde la vida por un edema pulmonar. Además, Aritz Artieda, Javier Arkauz, César Nieto, Beñat Arrue e Iñaki Ayerza mueren en el monte Pumori al ser sorprendidos por un alud. Y José Antonio Garcés Galindo muere cuando descendía del Dhaulagiri.
2002. Ginés Ruiz Fernández, se deja la vida en el Everest.
2003. José Manuel Buenaga cae al vacío cerca de la cunbre del Gasherbrum I.
2004. Al igual que Buenaga, José Antonio Antón López muere en el mismo monte y por las mismas causas. Daviz Ariz Munárriz pierde la vida en un alud en el monte Drifica (6.447 metros), en el Karakorum pakistaní. Manel de la Matta fallece por una peritonitis en el K-2 y Xabier Ormazábal perece tras hacer cima en el el Cho Oyu (8.201 metros).
2007. Guillermo Mateo Yeste muere como consecuencia de una caída en el Ama Dablam (6.856 metros), en el Himalaya nepalí. Santiago Sagaste y Ricardo Valencia, pierden la vida cuando un alud sepultó la tienda en la que dormían en el Dhaulagiri e Íñigo de Pineda Blanc sufre una caída de mil metros cuando descendía el Kanchenjunga.
2008. Rafael Guillén, fallece por cansancio en el Dhaulagiri. Este mismo año Iñaki Ochoa de Olza, no puede salir con vida del Annapurna después de permanecer cinco noches a 7.400 metros de altitud en estado grave afectado por una lesión cerebral complicada por otra pulmonar.
2009. Luis María Barbero desaparece en el Gasherbrum II (8.035 metros). Oscar Pérez sufre una caída en la que se fractura una pierna y un brazo cuando intentaba el ascenso al Latok I, en Pakistán. El mal tiempo y las escasas posibilidades de encontrarlo con vida obligó a abandonar el operativo.
2010. Muere Tolo Calafat cuando descendía del Annapurna. De esa expedición era parte Juanjo Garra.
2012. Martí Gasull es sepultado por un alud a unos 7.000 metros de altura en el Manaslu (8.163 metros).
2013. Juanjo Garra muere al fracturarse un tobillo en el Dhaulagiri y pasar tres noches al raso a uno 8.000 metros de altitud.
2013. Xevi Gómez, Abel Alonso y Álvaro Paredes son dados por fallecidos por los equipos de rescate tras cinco días de búsqueda en el G-1. Hicieron cima pero se desorientaron en el descenso.