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CUATRO RAYAS 30 - ATLÉTICO 25

El Cuatro Rayas gana al Atlético y certifica su permanencia

El Cuatro Rayas ha hecho valer el coraje y la necesidad para imponerse a un Atlético de Madrid a medio gas que no se jugaba nada.

Actualizado a
Aguinagalde
AguinagaldeRafa Aparicio

El Cuatro Rayas ha hecho valer el coraje y la necesidad para imponerse a un Atlético de Madrid a medio gas que no se jugaba nada, mientras que los vallisoletanos, con este último triunfo, certifican la permanencia para la próxima temporada, en la que ya no estará Juan Carlos Pastor.

Los vallisoletanos salieron con mucha intensidad, con el fin de impedir al Atlético de Madrid tomar la iniciativa en el marcador, para lo cual además plantearon una seria defensa desde el inicio que, sin embargo, no fue suficiente para evitar que los madrileños dominaran el resultado (1-3). Pero el trabajo de los locales tuvo su recompensa y el cuadro visitante comenzó a cometer errores en los pases y lanzamientos, lo que otorgó el control del marcador al Cuatro Rayas (9-7), si bien Ferrer con su efectividad en el tiro y Hombrados con su seguridad en la portería, volvieron a equilibrar el juego.

El conjunto vallisoletano no se rendía y luchaba en cada jugada para verse beneficiado ante un Atlético de Madrid en el que la relajación era evidente y que tuvo en Hombrados a su principal referente -diez paradas en la primera mitad-, lo que permitió a los rojiblancos llegar al descanso con sólo un gol de desventaja (15-14). Ese gol fue inmediatamente anulado por el equipo de Dujshebaev, que hizo valer el poderío físico de Aguinagalde en el pivote para devolver las riendas del juego a su equipo (15-17), aunque los locales no tardaron en reaccionar, con un magistral Jorge García Vega en la dirección.

El Cuatro Rayas engrasó la maquinaria, la necesidad pudo con la calidad individual de los madrileños y, con la efectividad de los extremos, sobre todo de Víctor Alonso, el Cuatro Rayas empezó a dominar con mayor claridad, hasta establecer una renta de cinco goles (26-21), a falta de siete minutos para la conclusión.

Marko Krivokapic quiso despedirse con el mejor sabor de boca de su carrera profesional y tiró de galones para mantener esa renta de cinco goles (29-24), que ya sería definitiva para que el Cuatro Rayas sumara la victoria y, con ella, su continuidad en la liga Asobal.