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JORNADAS ANTIDOPAJE AEA

Gómez Bastida, un sabueso para dirigir la inteligencia de la AEA

El guardia civil que dirigió la instrucción de la Operación Puerto se pondrá el lunes al frente del Departamento de Inteligencia e Investigación de la Agencia.

Enrique Gómez Bastida, en su presentación en las Jornadas de la AEA.
JAVIER GANDUL

Cuenta Ana Muñoz, directora de la Agencia Estatal Antidopaje, que cuando le comunicó a Travis Tygart, director ejecutivo de la USADA y azote de Lance Armstrong, que había fichado a Enrique Gómez Bastida para dirigir su nuevo Departamento de Inteligencia e Investigación este exclamó: “He’s the best!” (“¡Es el mejor!”). La Agencia Estatal Antidopaje ya tenía a su sabueso: el guardia civil cuya carrera creció paralela a la instrucción de la Operación Puerto en la UCO (la Unidad Central Operativa que también desarrolló la Operación Galgo), hasta su próximo ascenso a comandante de la Benemérita.

Gómez Bastida, discreto y escondido bajo la seriedad del verbo administrativo del cuerpo, pasó ayer el trago de su presentación pública en las Jornadas de Salud y Lucha contra el Dopaje organizadas por la AEA. En la primera fila, muchos de sus ya excompañeros. Él será ahora el contacto para dar la voz de alarma sobre posibles investigaciones.

“Nos incorporaremos también a una red internacional de intercambio de información con otros países”, explicó Gómez. Y es que el comercio de sustancias dopantes y las tramas se han globalizado: a Eufemiano Fuentes acudían, por ejemplo, clientes de toda Europa. Según datos de la Agencia Mundial Antidopaje, el tráfico de doping factura más euros que el de heroína, unos 15.000 millones al año. 

El casi comandante, que el lunes inicia su trabajo de lleno, pretende que los datos que maneje sirvan para “dirigir los controles” y marcar estrechamente a sospechosos, también para “dar respuesta a los rumores que circulan sobre determinados deportistas”, a “estrechar los lazos con las Fuerzas de Seguridad”… En definitiva, a no malgastar esfuerzos. 

El nuevo departamento pretende ir de la mano también de las autoridades sanitarias. Por ejemplo, “colaborando con las Comunidades Autónomas para evitar desvíos de medicamentos a mercados ilegales”, porque han salido partidas de EPO desde centros públicos. También para que los hospitales comuniquen si hay pacientes “con fallos multiorgánicos” producto de transfusiones. O el control del comercio por internet. Mucho trabajo de coordinación con Interpol, Europol o AMA con la ventaja de que todos saben ya quién es ‘Enrique’. El sabueso