Plaza Mayor

Grande Cavaliere

Silvio Berlusconi, presidente del Milán, dio con la clave para detener a Messi: marcarle al hombre. Es decir, primero le marca un hombre, luego otro y así hasta que no queden hombres en Lombardía. Besuconi (perdón, Berlusconi) dibujó la táctica sobre una servilleta del Disco Pub Afrodita y se la dio a Allegri, entrenador de principios inamovibles: el jefe siempre tiene razón y si no la tiene se le da.

Messi está triste

Algo le ocurre a Messi. Ya no es aquel joven vivaracho y encantador, hablador incansable e insuperable contador de chistes, desternillante Chiquito del Paraná. Según ha filtrado su entorno (Villa), Messi está afectado por la muerte de la mamá de Bambi y por el cruel desprecio a Dumbo. Atento al caso, Zubizarreta le ha hecho llegar las obras completas de Winnie The Pooh a ver si remonta.

De Madrid al cielo

La progresión de Kaká en el Real Madrid podría sufrir un parón si, tal y como parece, Kaká es elegido Papa. El caso es que el Vaticano no encuentra un varón más virtuoso que él. Se le perdona aquella operación de 2010 y un "¡cáspita!" de 2008, cuando se hizo las ingles brasileñas. Según sus defensores en el cónclave, Kaká tiene la paciencia de Job y el golpeo de Moisés.

Talento o peluca

Lo cierto es que se piden menos requisitos para ser Papa que para ser presidente del Real Madrid. Tampoco es sencillo ser candidato al banquillo madridista. Hay que tener el pelo señorialmente canoso, barriga que no desborde (no mucho) y hablar idiomas. De ahí que a Florentino le gusten Lippi, Ancelotti, Wenger, Richard Gere y Carlos Sobera.

Suena Laudrup

A pesar de los gustos presidenciales, la encuesta de AS.COM no ofrece dudas. Los internautas quieren a Laudrup (73%) antes que a Benítez (18%) y muy delante del favoritísimo Ancelotti (11%). Así lo manifestaron aún antes de conocer la victoria del Swansea (filial del Oviedo) en la Capital One. Se confirma que la gente tiene extrañas opiniones. Prefiere a un entrenador con todo por delante a uno con todo por detrás.

París será una fiesta

Si Mou recala en el PSG, la próxima versión de los X-Men se rodará en el vestuario del equipo. Allí coincidirían Mou (Profesor X), Ibra (Lobezno), Beckham (Cíclope) y Victoria (Tormenta). La cosa puede terminar con Mourinho de alcalde de París, Beckham en el Louvre, Victoria con un nuevo bebé (de nombre Asterix), Ibra de jeque y el jeque de pintor de Montmartre. Y ese sería el final feliz.

Aúpa, Racing

El Racing de Santander ha cumplido cien años, mérito fastuoso para un club que ha padecido a Piterman, Alí Syed, Pernía, Manolo Sáiz, Tchité y otros. El Centenario coincide con un repunte del equipo, que pelea por no descender a la Liga Altamira. Ojalá el Racing salve el trance, porque la categoría ya la tiene. La unión hará la fuerza. El resto, la Interpol.

Las carga el diablo

Es muy probable que en Sudáfrica condimenten con pólvora la carne de antílope. Pistorius acribilló a su novia por confundirla (dice) con un ladrón. Poco después se supo que el detective que investiga el caso disparó contra un minibús. Y ayer mismo, el hermano del atleta fue acusado del asesinato de un motorista en 2010. Ni siquiera la Operación Puerto luce un reparto tan espléndido. Aún.

La frase

Ibra: "Soy el más grande después de Muhammad Alí"

Horror: eso deja a Mourinho en tercera posición.