HUNGRÍA 32 - EGIPTO 23
Hungría no da pie a la sorpresa y vence a Egipto con claridad
La selección húngara no dio pie a la sorpresa y solventó con una contundente victoria (32-23) sobre Egipto su debut en el Mundial.
La selección húngara no dio pie a la sorpresa y solventó con una contundente victoria (32-23) sobre Egipto su debut en el Mundial de España, en un encuentro en el que el portero magiar Roland Mikler se encargó de acabar con las expectativas que había suscitado el cuadro norteafricano durante la fase de preparación.
Unos días en los que Egipto se había puesto en boca de todos, en especial, tras imponerse la pasada semana por un contundente 18-34 a Serbia, vigente subcampeón de Europa, un resultado que la contundente y sólida húngara apenas tardó hoy unos minutos en convertir en una simple anécdota. El rocosísimo 6-0 de los magiares maniató por completo a la gran estrella egipcia, el lateral derecho Ahmed Elahmar, que tuvo que abandonar desesperado la pista mediada la primera mitad, tras anotar tan sólo uno de los siete lanzamientos que intentó.
Todo lo contrario que Laszlo Nagy, que tan sólo falló uno de los cinco disparos que lanzó los primeros treinta minutos, en los que el exjugador del Barcelona, lideró con sus potentes y precisos zurdazos el primer despegue (4-0) del conjunto magiar en el marcador. Una escapada que Egipto logró contener momentáneamente, gracias a la mayor velocidad de la que fue capaz de dotar a sus acciones ofensivas en los siguiente minutos, en los que los norteafricanos llegaron a reducir su desventaja (5-4) a tan sólo un gol.
Pero el guardameta magiar Roland Mikler, siempre a la sombra de Nandor Fazekas, no estaba dispuesto a que nada, ni nadie empañara su debut como titular en la portería húngara en una gran competición internacional. Así parada a parada, hasta contabilizar un total de quince, para concluir con un excepcional 63 por ciento de acierto en la primera mitad, el meta del Pick Szeged fue menguando la opciones de victoria de la selección egipcia, que sólo pudo batir al inspirado Mikler por medio del interesante Abou Ahmed.
Argumento insuficiente para evitar la escapada de Hungría en un marcador, que dejaba casi sentenciada la contienda al descanso con los ocho goles de ventaja (17-8) que reflejaba a favor del conjunto magiar. Pero si algo demostraron hoy los egipcios es su incapacidad para el desánimo, lo que les permitió aprovechar la lógica relajación de Hungría en la segunda mitad, para engancharse de nuevo al encuentro (22-19) mediada la segunda mitad, tras endosar a los magiares un contundente parcial de 5-10.
Una remontada con la que se encargó como no, el portero Roland Mikler, que con un par de nuevas intervenciones, pareció devolver la inspiración a la selección húngara, que aprovechó la efectividad de sus hombres de segunda línea, en especial el extremo derecho Gergely Harsanyi, para volver a destacarse (25-20) en el marcador Un despegue que se encargó de convertir en definitivo el talentoso central húngaro Gabor Csaszar, elegido mejor jugador del partido, que con sus ocho goles disparó la renta de los de Lajos Mocsai hasta los nueve tantos que reflejó el 32-23 final.